CATAR 2022

Colombia y Barranquilla. Esa unión que se forjó a partir de la comprobación de que la humedad y el calor se convierte en el jugador número 12 del combinado cafetero, retará nuevamente a Uruguay a lograr lo que hasta ahora no fue posible: sumar tres puntos en el Estadio Metropolitano.

Para este choque, el tercero de la fase de clasificación rumbo a Catar 2022, por si fuese poco, también se llega con una diferencia notoria a favor del combinado de Carlos Queiroz. Porque por más que desde Cali a Manizales o desde Bogotá hasta Santa Marta se hable de las ausencias que tiene Colombia, no están ni cerca de tener el peso, que por ejemplo, ostenta para Uruguay la baja de Federico Valverde.

Es simple, cuando se pone el foco en Radamel Falcao, baja provocada por problemas físicos en el Galatasaray, no puede desconocerse que el “Tigre” no fue titular en ninguno de los dos partidos disputados hasta la fecha. Es más, ante Venezuela entró a los 74 minutos por Duván Zapata y frente a Chile a los 72’ por Wilmar Barrios.

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Para ser claros: Queiroz usó de titulares a James Rodríguez, Duván Zapata y Luis Muriel en la ofensiva cafetera de los dos compromisos.

Se anuncia, también, que no está Rafael Santos Borré, por culpa del COVID-19. Pero no cambia nada porque no estuvo en la doble fecha anterior. Y la ausencia de Santiago Arias ya la había experimentado ante Chile. Las otras ausencias no son destacadas.

Para Uruguay, en tanto, aunque no está formalmente decretado el valor, está claro que jugar sin “Pajarito” Valverde tiene un enorme peso.

Su presencia en el mediocampo es determinante, mucho más con el nivel que sigue demostrando en el Real Madrid. Y en tiempos de romance con la red.

Hastala baja de Maximiliano Gómez, futbolista utilizado y con gran resultado frente a Chile (el día del comienzo de las Eliminatorias), pega más que la ausencias que acusa Colombia como minimizantes de su real poderío.

Si bien no puede darse nada por hecho antes de jugar el partido, ni siquiera se puede establecer si el grado de rendimiento de los suplentes será inferior al de los titulares, queda claro que el potencial colombiano no resulta tan afectado como el uruguayo. En términos concretos: hay un equipo al que se cayó una pieza trascendente y otro al que le faltará un buen suplente.

La sociedad Colombia-Barranquilla y las bajas en las filas propias: un duro escollo para Uruguay.