EN EL DISCO

Con el anuncio de un aumento de premio hípico del 10% a partir del primero de abril, con una jornada de Reyes donde se batieron los récords de beting total y juego promedio por carrera y con un Ajuste que irá a defender a nuestro Turf elevage al próximo Latino, abrimos el primer mes del año.

No es intención ver y comparar a los alrededores, pero sólo de saber que año a año debutan más caballos en nuestros hipódromos y qué hay más cantidad de animales en actividad, traza que nuestra hípica respira de buena forma.

Supimos de pulmotores, de desarraigo, de caídas estrepitosas y una reapertura hace 16 años y medio, cuando nadie se imaginaba que con el premio de un dos años con incremento se pagaría el año de pensiones, con las “propis” incluidas, o ganar una de tres años sin victoria en el limítrofe, marca qué hay cuatro meses pagos.

El futuro cambio de focos e iluminación de Maroñas podría torcer un poco hacia adelante y ver la chance de poder incluir la de césped, ¿se imaginan el Honor de dos milcuatro con luz artificial? No es una quimera, pero quizás pueda estar cerca. O cerrar el Ramírez 2021 con una de grama en largo aliento para deleite de propios y extraños, a pura luz en verde.

Y en modo sueño, y con poco, armar y separar a los caballos ganadores estelares del hincha y del desconocido que se acerca a una foto. Puede ser antipático, pero dejaría dormir a varios de mejor forma.