Juan Martín del Potro sigue con su trabajo de hormiga en el regreso a las grandes marquesinas del tenis mundial, aunque seguramente lo que más le interese sea jugar bien y si es posible sin dolor.

FERNANDO TETES

El argentino se metió en los cuartos de final del torneo de Múnich luego de vencer 6-3, 3-6 y 6-3 al local Jan Lenard Struff, ubicado en el puesto 112 del mundo, un dato que en el pasado lo tendría como amplio favorito, pero ahora, tratando de volver la brecha es menor.

El segundo partido ganado por el tandilense en tres años sobre polvo de ladrillo, donde no jugaba desde Roma de 2013, fue mucho más duro que el primero, ante el también local pero de origen jamaiquino Dustin Brown.

Luego de una hora y 53 minutos, "Delpo" se colocó por segunda vez en el año en cuartos de final, ya que en Delray Beach, justamente el evento en el que retornó al circuito y llegó a semifinales.

De hecho el ex top ten argentino está apenas disputando su tercer torneo del año, ya que además jugó en el Masters 1000 de Miami.

El tandilense suma 18 títulos en su carrera, y ya está 320 del mundo en el ranking real, pese a que utiliza su protección por lesión para entrar a los torneos.

Igualmente "Delpo" pasó del ranking 1.042 al 420 desde inicio de año al 22 de febrero. Su próximo rival será más duro, porque no sólo se trata de un jugador local, sino que está 27 del mundo y tiene muchísima experiencia: Philipp Kohlschreiber, quien pese a estar más cerca del retiro que de la plenitud, sigue tumbando grandes y defendiendo a su país en la Copa Davis. El teutón se impuso 6-3 y 6-2 a su compatriota Florian Mayer, 267 del mundo y con recorrido desde la clasificación.

Otros dos resultados se destacan en la jornada de octavos de final de Múnich. Por un lado el triunfo del primer cabeza de serie, el belga David Goffin, 5-7, 6-3 y 6-2 ante el dominicano e interminable Víctor Estrella, y el del quinto pre clasificado, el italiano Fabio Fognini, 6-3 y 7-5 sobre Mikhail Kukushkin.

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