Con las miradas puestas en el posible cruce entre Rafael Nadal y Novak Djokovic como mayor impacto ante la ausencia de Roger Federer, comienza hoy el Masters 1.000 de Montecarlo.

FERNANDO TETES

El torneo, que perdió su obligatoriedad hace unos años mantiene su lustre, y desde hace una década es ganado por tres jugadores: Nadal, Djokovic (uno de los dos no llegaría a la final este año), y Stanislas Wawrinka.

Claro que la superioridad del español es absoluta: participó en 13 y en nueve se llevó la copa. Desde 2005 ganó ocho y repitió en 2016. Nole, que había perdido dos finales ante "Rafa", se sacó las ganas en 2013 y en medio de ambos quedó el título de Wawrinka, quien le dio una sorpresa su compatriota Roger Federer, quien pese a disputar cuatro veces la final, nunca ganó.

Montecarlo comparte esa peculiaridad de haber sido ganado sólo por tres tenistas aún en actividad: "Rafa", "Nole" y Andy Murray. Es la otra cuenta pendiente de Federer, quien anunció que tal vez juegue este año, pero ya en la parte final de su carrera parece más preocupado por sus superficies favoritas, como Wimbledon y el US Open, que por seguir intentándolo sobre polvo de ladrillo, pese a que obtuvo una vez Roland Garros.

Para Rafa este año el torneo del Principado tiene tres alicientes: ganarlo nuevamente, transforma este evento en el tercero que obtiene por décima ocasión, y además, si es campeón, sobrepasará a Roger Federer al tope de la Carrera de Campeones.

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