El español y el suizo sorprendieron al mundo al llegar a la final del Abierto de Australia y reeditar un viejo duelo.

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Los dos exnúmero uno del mundo volverán a verse las caras en la definición de un torneo de Grand Slam, cuando salgan en busca del Abierto de Australia. Los antecedentes de finales del año 2016 no marcaban para nada que ellos serían las estrellas del inicio de la nueva temporada.

Por el contrario, todo hacía presumir que estarían a tono de un regreso progresivo, pero los resultados, su tenacidad, las ganas de superación y el gran tenis desplegado luchando en situaciones límites los volvió a enfrentar y con la motivación del primer título de Grand Slam de la temporada por delante. Nadal, campeón en 2009, debió batallar durante cuatro horas y 55 minutos para derrotar 6-3, 5-7, 7-6 (5), 6-7 (4), 6-4 a Grigor Dimitrov, mientras el suizo (ganador en 2004, 2006, 2007 y 2010) llega a la definición con un día más de descanso tras su victoria del día anterior 7-5, 6-3, 1-6, 4-6, 6-3 a Stan Wawrinka.

Por otra parte, ambos arriban a esta final en condiciones inéditas: Rafa es noveno y Roger 17 del mundo, lejos de sus lugares habituales de cuando peleaban por estas copas. Las finales de esta temporada en Melbourne tienen muchas particularidades, pero vaya una que suma a las hermanas Williams a la lucha masculina: es la primera vez desde que llegó al Era Profesional, en 1968, que los cuatro finalistas de un torneo de Grand Slam tienen 30 o más años, pero además se repiten los mismos cuatro de Wimbledon 2008.

Rafa pasó a jugar su primera final de un torneo de Grand Slam en tres años, desde aquella de Roland Garros 2014, y por última vez definió uno de los grandes ante Federer en ese mismo torneo, pero en 2011. Desde entonces nunca más fueron por la misma copa en una final de los torneos mayores. En cuanto a sus antecedentes, Nadal lidera 23-11 (14-7 en finales) y 6-2 si estas definiciones son en torneos de Grand Slam. Si se tomaran en cuenta algunas curiosidades, por ejemplo el tenista que ganó en la segunda semifinal, en este caso Nadal, se quedó con el trofeo en cinco de las últimas nueve ocasiones.

Si el campeón de la final del Abierto de Australia es Federer, el suizo se transformará en el primer tenista que gana cinco o más veces tres de los cuatro torneos de Grand Slam. En su haber tiene cuatro en Melbourne, siete en Wimbledon y cinco US Open. A esto suma una edición de Roland Garros para completar su propio Grand Slam.

También le daría la posibilidad de quedar tercero en la lista de jugadores que han ganado más veces en este torneo, detrás de los seis de Novak Djokovic y Roy Emerson.

Nadal también tiene marcas a vencer. En caso de ser el campeón puede transformarse en el primer jugador en la era profesional y el tercero en la historia del tenis masculino, que gana cada uno de los cuatro torneos grandes al menos dos veces.

Nadal hace ocho años que lo obtuvo por única vez, en tanto que Federer debió esperar siete para intentar ganarlo de nuevo.

El partido entre ambos es la rivalidad más repetida en finales de torneos de Grand Slam en la Era Profesional, ya que lo harán por novena ocasión, seguidos por los siete enfrentamientos en definiciones entre Novak Djokovic y Andy Murray, o el serbio ante el propio Nadal.

Claro que queda el recuerdo de que la final de 2009, la única que le dio la copa de Australia a Rafa, fue ante Roger y la ganó en cinco sets.

Eran otros tiempos, pero seguramente la ansiedad de los protagonistas y del público se mantiene incambiada desde entonces.

Sin embargo, si se trata de endulzar los recuerdos recientes, Federer derrotó a Rafa en la final de Basielea 2015, para cortar una racha de cinco partidos consecutivos perdidos ante el de Manacor.

Esto se contrarresta con los seis ganados consecutivamente por el español en partidos de torneos de Grand Slam.

La última vez que se enfrentaron en una final de un torneo de Grand Slam fue en el Abierto de Francia de 2011, dos años después de que Roger ganara su único título en Roland Garros (cuando Robin Soderling eliminó a Rafa) y, como era previsible, ganó el español.

Federer el tenista más ganador de todos los tiempos con 17 títulos buscará imponer su categoría ante el español Nadal. Para el suizo el triunfo tiene varios condimentos, uno de ellos volver a estar dentro del Top 10.

"Hace unos meses con Nadal estábamos más cerca de jugar un partido de caridad que una final de Grand Slam. Ahora definimos Australia. Quiero ganar, aunque después no pueda caminar por cinco meses."

Si Federer es el campeón en Melbourne pasará del puesto 17 en el que comenzó el torneo al 10, regresando rápidamente a los top 10 teniendo en cuenta que una lesión lo dejó afuera del circuito durante seis meses.

El suizo ganó Wimbledon 2012 y en caso de triunfar será el sexto tenista en la era profesional que gana al menos dos torneos de Grand Slam ya con 30 años cumplidos. Los otros son Laver, Rosewall, Agassi, Connors y ahí se cuela Wawrinka.

La racha de Federer en torneos de Grand Slam es 17-10 de cara a la definición en Melbourne. El suizo perdió las últimas tres que jugó: en Wimbledon 2014 y 2015, además del US Open 2015, todas ante un duro rival como es Novak Djokovic.

Con 14 grandes títulos en su haber, Nadal se presenta como un pesadilla para Roger en la final. El español vuelve a definir un Grand Slam, algo que desde el 2014 no lograba. Conoce perfectamente a su adversario.

"Jugar nuevamente la final del Abierto de Australia, y nada menos que ante Federer, es antes que nada un enorme privilegio", dijo el mallorquín luego de haber conseguido su victoria en semifinales ante Grigor Dimitrov.

La revancha de Nadal es tremenda. El año pasado perdió en la primera ronda de este torneo ante su compatriota Fernando Verdasco en cinco sets. Sólo una vez había perdido en un torneo de Grand Slam, fue en Wimbledon 2013 ante Steve Darcis.

El tenista nacido en Manacor es el único tenista zurdo que ha jugado la final del primer torneo grande del año, desde que el checo Petr Korda derrotó al chileno Marcelo Ríos en la definición de 1998 en Melbourne.

El camino de Nadal a la final incluyó victorias a cinco sets ante Alexander Zverev y Grigor Dimitrov, a cinco sets, cortando una racha adversa del español. Había perdido sus anteriores cinco partidos en el formato largo y ahora está 19-8, de los cuales son 7-3 a cinco sets en Melbourne.

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