“Nole” y Roger, frente a frente en una definición como para alquilar balcones

Novak Djokovic y Roger Federer jugarán la final de Wimbledon. Son el uno y el dos del mundo y parecería hasta natural que esto sucediera.

Los dos ganaron sus partidos en sets corridos y ambos buscan seguir construyendo su historia sobre el césped que ya los vio irse a cinco sets en la última final.

Que "Nole" haya vencido 7-6 (2), 6-4, 6-4 a Richard Gasquet para obtener el pasaporte directo a la defensa de su copa ganada en 2014 no debería extrañar.

El uno del mundo llega de esta forma a 17 finales de Grand Slam, superando la marca de Bjorn Borg en ese rubro, y tratará de quebrar esa racha pareja de ocho ganadas y ocho perdidas cuando vaya por su tercera copa en el All England.

En total será la final 78 de su carrera, y sigue en pie un común denominador en 41 de las últimas finales de Grand Slam: seguro estará uno de los integrantes del trío más ganador de la última etapa, Federer, Djokovic y Nadal se reparten esas presencias. La única excepción fue el título de Cilic ante Nishikori el año pasado en New York

Djokovic, con dolor en un hombro al que le restó importancia, no perderá su condición de uno del mundo si no gana a Roger, y tampoco habrá un recorte que lo ponga en riesgo respecto a la diferencia de puntos.

Sin embargo nuevamente se enfrenta a un suizo en una final, como hace un mes en París, cuando su mayor sueño lo cortó Stanislas Wawrinka.

Enfrente esta vez estará una de las mejores versiones de Federer, que aplastó 7-5, 7-5, 6-4 a Andy Murray jugando seguramente el mejor de sus partidos en Wimbledon

El increíble Federer llegó ya a 26 finales de Grand Slam, 10 de ellas en el All England, con 1.036 victorias en su carrera, y racha 40-6 en esta temporada.

El domingo puede ganar su título 18 de los grandes marcando aún a sus casi 34 años el rumbo en el circuito permaneciendo en la cúspide y en busca de su quinto cetro del año.

El suizo llegó al menos a una final de Grand Slam en 12 de los últimos 13 años, con la excepción de 2013.

Nunca, cuando llegó a semis, perdió. Es un porcentaje de 100% de efectividad increíble de un jugador que en agosto llegará a 34 años y sigue deleitando con los conejos que saca de su muñeca derecha.

"Todos lo conocemos, es el mejor de la historia. Jugar contra él es el mejor reto que puedo tener", dijo el uno del mundo sobre Federer, que dijo que quiere coronarse otra vez en Wimbledon.

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