Iñigo Cervantes regresó a Montevideo a defender su condición de finalista 2015. El español, hijo de futbolista y que practicó este deporte hasta los 14 años, busca terminar entre los 100 mejores del año. Vivió en este 2016 un feo momento de amenaza de muerte tras ganar en Hamburgo.

FERNANDO TETES

-¿Qué balance haces de esta temporada que se termina? -Por un lado fue muy positivo porque jugué el 90% en torneos de ATP, todos los Grand Slams, experiencias en canchas grandes ante jugadores entre los 20 primeros del mundo, pero a final del año para asegurarme el top 100 viene a Sudamérica. Jugué en Colombia y voy a terminar el año acá. Estoy muy motivado.

-Uno de tus mejores triunfos fue ante Zverev en Hamburgo y terminó con amenazas de muerte.

-Es un tema muy delicado porque me sorprendió que aún ganando recibiera amenazas importantes. Por eso lo hice público, porque es normal que eso suceda cuando pierdes. Por eso se le dio tanta notoriedad al tenis.

-¿Por qué crees que sigue sucediendo y no se corta?

-El tema está muy complicado con las apuestas. Se nos ha escapado un poco de la mano que cada jugador figura en las apuestas de las diversas casas y pueden apostar a favor o en contra tuyo, y con el auge de las redes sociales es fácil recibir mensajes a través de Facebook o Twitter. Por ahora no sucedió nada, pero una vez después que gané un partido en un challenger se me acercó un señor con una papeleta a mostrarme que había apostado a mi favor y estaba contento, pero si en su lugar hubiera perdido y viene enojado yo estaba indefenso.

-¿Sientes un poco de peligro por esta situación?

-Alguna vez comenté en ATP que nosotros no recibimos nada a cambio de todo esto. Damos nuestro nombre a las casas de apuestas y no sé si tengo el derecho a plantear si no quiero figurar para que la gente no pueda apostar en favor o en contra mío. Todos pueden hacerlo y me parece que esto es injusto. Además, al figurar en las apuestas, se pueden recibir amenazas. Cada semana hay jugadores que pierden y reciben insultos, amenazas a la familia y ese tipo de cosas. Es muy incómodo.

-¿Es difícil destacarse en el tenis español con tantos top 100?

-Llevamos muchos años con 15 jugadores top 100 y eso hace que casi no se hable del resto. Si no ganas un torneo por semana parece que no somos nada. Nos hemos malacostumbrado a tener muchos buenos, pero a los que venimos atrás se nos da menos bomba. También eso nos hace ser más constantes y duros para seguir yendo hacia adelante con nuestro tenis. Eso es lo positivo.

CERVANTES