Repitió la receta de 2015 y volvió a consagrarse como el mejor equipo del Torneo Uruguayo de Clubes tras vencer a Old Boys 14 a 11 en el Estadio Charrúa.

Los azules coronaron otro año inolvidable, ya que también lograron el título, al igual que en 2015, en Pre Intermedia tras vencer a Cuervos 50 a 22, y en Intermedia luego de derrotar a Carrasco Polo 18-15.

Pero faltaba la frutilla de la torta. La final de Primera División ante el clásico rival: Old Boys. Y con fiesta adentro y afuera de la cancha, el torneo local tuvo un cierre espectacular.

Es que en los 80’, los dos equipos prtagonizaron un partidazo donde las defensas se hicieron sentir para tratar de absorber los ataques. Y así fue. El escaso marcador fue una clara muestra de eso.

El azulgrana pegó primero y con un try de Andrés Vilaseca tras pase de su hermano Santiago, se puso en ventaja 5-0, pero casi que de inmediato, Andrés De León comenzaba a escribir la historia de una tarde para el recuerdo. El 15 de Old Christians descontó con un penal y luego, con otro, hizo que su equipo pasara al frente 6-5. A pesar de eso, Old Boys se fue al descanso 11-6 arriba ya que Germán Albanell aprovechó dos patadas a los palos y no falló.

Pero el azulgrana se quedó con 14 jugadores antes de terminar el primer tiempo por una amarilla a Juan Manuel Gaminara a los 37’, salida que le costó cara al equipo de Gonzalo Amaya y Joaquín Pastore porque ni bien comenzó el complemento, a los 43’, Andrés De León apoyó un try para empatar el partido.

El mismo De León falló la conversión y el marcador quedó igualado. Se esperaba un cierre de partido para el infarto. El que hiciera puntos, seguramente se iba a quedar con la final y por ende, con el título.
Las defensas se agigantaron otra vez, pero en el cierre, Old Boys pagó el costo de otro acto de indisciplina: amarilla para Carlos Pombo y final del partido con 14 para los azulgranas.

De ese penal llegaron los tres puntos que le dieron el triunfo a Old Christians por 14 a 11 y el bicampeonato uruguayo.

Premio para un equipo que fue creciendo a lo largo de una temporada en la que le hizo frente al torneo local y también a la competencia internacional ya que junto a Old Boys disputó el Torneo Argentino “B” llegando a la final.

Old Christians coronó otro año redondo y lo hizo ganando un clásico que tuvo fiesta también afuera de la cancha. Las dos hinchadas compartieron una misma tribuna, sin separaciones ni guardia policial. Un hecho sobresaliente y a destacar por estos tiempos.

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