JAPÓN 2019
El capitán de Nueva Zelanda en los mundiales de 2011 y 2015, Richie McCaw dejó la Copa Webb-Ellis para el futuro monarca del torneo.
La ceremonia inaugural del noveno Mundial de Rugby, el primero de la historia en suelo asiático, homenajeó a la cultura y la historia de Japón.
En el espectáculo los bailes tradicionales y las artes marciales fueron apareciendo sobre fondos en tres dimensiones. El típico repiqueteo de los tambores japoneses acompañó el nacimiento y la evolución del rugby, lo que fue apareciendo en imágenes sobre un Monte Fuji nevado, rodeado por niños, embajadores de los veinte países participantes.
Nueva Zelanda y Sudáfrica, dos de los favoritos para el título, fueron tan aplaudidos, como los anfitriones.
Unos escolares el himno del torneo, 'World in Union', antes de que imágenes de las ocho Copas del Mundo precedentes aparecieron sobre el Monte Fuji.
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Para los fanáticos del deporte, el ingreso Richie McCaw, uno de los exjugadores más emblemáticos neozelandeses, con la Copa Webb-Ellis fue otro de los puntos altos de la ceremonia.
El capitán de los All Blacks campeones del mundo de 2011 y 2015 depositó el trofeo una. Pocos después, el príncipe Akishino declaró inaugurado el campeonato.