RECUERDO MUNDIALISTA

Hace exactamente 36 años, el 25 de junio de 1982, se jugó un partido casi amistoso entre Alemania y Austria en el Mundial de España, ya que acordaron el resultado para la clasificación de ambos a la siguiente fase.

Quedó registrado como “el partido de la vergüenza”. En Alemania fueron más benévolos y lo llamaron Nichtangriffspakt von Gijón, que quiere decir “Pacto de no agresión de Gijón”. El 25 de junio de 1982, por el Mundial de España, Alemania Federal y Austria acordaron el único resultado que clasificaba a ambos para la segunda fase: 1-0 para los alemanes. Y eso fue posible porque durante los 80 minutos posteriores al gol germano no ocurrió nada en la cancha, salvo una interminable sucesión de pases hacia los costados.

El grupo 2 de aquel Mundial comenzó con la mayúscula sorpresa del triunfo de Argelia sobre Alemania por 2 a 1, en tanto Austria vencía a Chile 1 a 0. En la segunda fecha, los germanos golearon a Chile por 4-1, en tanto los austríacos batieron a los argelinos 2-0.

Por la fecha decisiva, Argelia le ganó a Chile 3-2 el 24 de junio. Alemanes y austríacos jugaron recién al otro día, en el estadio El Molinón de Gijón. Tuvieron tiempo para hacer cuentas: Alemania debía ganar para clasificarse, pero si lo hacía por dos goles de diferencia o más, también pasaba Argelia.

Hasta los 10 minutos, fue un partido normal. En ese momento, el alemán Horst Hrubesch convirtió de cabeza. Y a partir de entonces finalizó toda competencia, entre extraños diálogos de los futbolistas en la cancha. El público comenzó pronto a insultarlos, desde “¡Fuera!” hasta “¡Que se besen...!”.

Argelia protestó ante la FIFA, pero no hubo sanciones. De cualquier manera, desde ese día los partidos de la última fecha de cada serie en los mundiales se juegan a la misma hora.

Casi 25 años después, el jugador alemán Hans-Peter Briegel admitió el arreglo, en una entrevista con un medio de Emiratos Árabes. Y dijo: “Solo me puedo disculpar ante los argelinos”.