SELECCIÓN

De los que terminaron siendo titulares, tienen chances de jugar uno, dos y hasta tres mundiales más con la selección uruguaya.

Mucho se habla, tras la salida de Uruguay del Mundial, del recambio generacional que puede sentir la selección en el corto plazo.

De los que terminaron como titulares en Rusia, Fernando Muslera, Diego Godín, Martín Cáceres, Luis Suárez y Edinson Cavani entran dentro de ese análisis pensando en el objetivo final: Qatar 2022.

Lo positivo en ese sentido es que la zona de la mitad de la cancha no sufrirá grandes cambios. Al contrario, los volantes tienen cuerda para rato...

Matías Vecino, por ejemplo, cumplirá 27 años el mes próximo y está en carrera para disputar un Campeonato del Mundo más.

Nahitan Nández y Lucas Torreira, con 22 años cada uno (cumplirán 23 en diciembre y febrero próximo), tranquilamente pueden repetir en las dos próximas ediciones. Lo mismo para Giorgian De Arrascaeta, que arrancó el certamen como titular y después perdió pie. Recién tiene 24.

Ni que hablar el caso de Rodrigo Bentancur. Recién cumplió 21 y no sería nada alocado pensar en que pueda disputar hasta tres mundiales más.

Además, hay otros jóvenes como para anexarse a esta zona de la cancha. Federico Valverde, que cumplirá 20 a fin de mes, es el ejemplo más claro.

Cristian Rodríguez (cumplirá 33 en septiembre) y Carlos Sánchez (llegará a 34 en diciembre), son los dos nombres de esta zona de la cancha para los cuales este parece haber sido su último Mundial.

Sin embargo, con sus ausencias Uruguay no solo perderá experiencia. También dejará de contar con características que esta camada de jóvenes hoy por hoy no tiene: potencia y vértigo. El mediocampo es donde Uruguay menos sufrirá el recambio. La transformación que Tabárez comenzó a hacer un año atrás seguirá dando sus frutos por un buen tiempo.