Carlos Saínz perdió la punta del rally que ahora es de Peterhansel.

Tal como se preveía, el desarrollo de la décima etapa del Rally Dakar disputada ayer entre las localidades de Belén y La Rioja, deparó importantes novedades con respecto a la clasificación general de la categoría autos, dándole la razón a quienes vaticinaban que iba a ser el gran filtro de la carrera.

Carlos Sainz, que comenzó la jornada como líder, vio esfumarse sus posibilidades de seguir manteniendo la posición de privilegio, al quedarse detenido por un problema mecánico en medio de un mar de dunas, en el kilómetro 213 de la carrera.

Stéphane Peterhansel, que inició la jornada como escolta, ganó la etapa y pasó a liderar cómodamente la general, cuando solamente restan tres días de carrera. Todo parece encaminarse para que "Monsieur Dakar" obtenga su duodécima victoria en el historial del rally raid más duro, exigente y famoso del mundo.

Esta décima etapa, que se desarrolló por las espectaculares dunas de Fiambalá, estuvo signada por los problemas desde antes del comienzo.

En la noche del martes cayeron abundantes lluvias en la región, las cuales provocaron el desborde de varios ríos. Esto obligó a que la largada de la etapa se viera retrasada.

Pero también hubo problemas al final, con un río desbordado que no daba paso, lo que obligó a las autoridades del rally a adelantar el punto de llegada, dando por terminada la etapa en el control de paso número 5 (CP 5), ubicado en el kilómetro 244,700 del recorrido original.

Aprovechando su notable y exitosa experiencia para manejarse en las dunas, Peterhansel "voló" con su Peugeot 2008 DKR, logrando la victoria con un tiempo de 3 hs. 58 min. 32 segs. Fue escoltado a 5,40, por su compañero de equipo Cyril Després. Tercero fue el sudafricano Giniel de Villiers (Toyota) a 26,16 del ganador y cuarto otro sudafricano, Mark Corbett, con un Century, a 39,16.

Nasser Al-Attiyah también tuvo serios problemas. Volcó a seis kilómetros de la largada y se vio retrasado, terminando la etapa a 52 del ganador, seguido por su compañero del equipo MINI, Mikko Hirvonen, a tres minutos y medio.

Sébastien Loeb tampoco se salvó de las dunas, quedando varado y perdiendo varios minutos.

Peterhansel lidera con una hora exacta de ventaja sobre Al-Attiyah. El sudafricano de Villiers quedó tercero a una hora y 12 del líder, seguido a 11por Mikko Hirvonen.

Todo parece indicar que Peterhansel tiene una inmejorable chance de lograr la victoria final este sábado en Rosario. Nada hace prever que pueda perder la posición de privilegio en estas últimas jornadas, pero nada es seguro jamás en el Dakar.

La undécima etapa, que será entre La Rioja y San Juan, no estará exenta de dificultades.

Habrá tramos para todos los gustos y las cualidades de manejo. Comenzará con sectores del tan temido "fesh fesh", ese polvo tan liviano, similar al talco, que queda en suspensión en el aire durante mucho tiempo y su escasa densidad provoca que los vehículos se entierren fácilmente. Y también habrá sectores muy pedregosos, con todos los riesgos que implican, principalmente los de las numerosas pinchaduras. Algunos sectores más rectos permitirán desarrollar toda la velocidad a los vehículos. Claro, a aquellos que estén en condiciones de poder hacerlo a esta altura del rally. Porque la gran mayoría están enfrascados simplemente en poder llegar a la rampa final.

Porque como siempre decimos, están los que corren para ganar el Dakar y los que corren para ganarle al Dakar.

RALLY DAKARNELSON VICENTE