El jamaiquino solo consiguió, en Río, la misma cantidad de medallas que la Argentina; diferencias entre el rey de las pistas y los 216 atletas argentinos

Eterno. Único. ¿Inigualable? Usain Bolt, en los Juegos Olímpicos de Río 2016, demostró por qué es el atleta más trascendental de la historia del atletismo.

El jamaiquino, con la posta 4x100 metros, logró su tercera medalla de oro consecutiva para alcanzar la triple-triple: ganó en tres Juegos consecutivos los 100, 200 y la posta 4x100 metros.

En Río, Bolt empleó nada más que 107,12 segundos para completar las seis carreras (tres en los 100 metros, 2 en los 200 y 1 en la posta 4x100), que corrió el hombre que el próximo domingo 21 de agosto cumplirá 30 años. O, 1 minuto 47 segundos y 12 milésimas para sumar 3 medallas de oro. Demoledor.

Las tres veces que corrió 100 metros en Río, Bolt estuvo en pista 29,74 segundos. En los 200 metros, 40,06 segundos. Y en la posta 4x100 metros, el equipo jamaiquino que integró junto con Asafa Powell, Yohan Blake y Nickel Ashmeade, se hizo de la medalla de oro en 37,27 segundos.

Tomando esos números, la Argentina con sus 216 deportistas, también obtuvo 3 medallas de oro. Paula Pareto, en judo, Santiago Lange y Cecilia Carranza, en vela, y los Leones, en hockey sobre césped. Cada disciplina, es cierto, tiene su complejidad y su sistema para alcanzar la presea dorada. La Peque Pareto, en 4 combates, estuvo en el tatami 20 minutos.

Lange y Carranza, entre las 12 regatas y la Medal Race, navegaron durante 6 horas 16 minutos y 11 segundos. Y los Leones, jugaron 8 partidos que les implicaron 8 horas de juego. En total, las tres medallas de oro argentinas se gestaron tras 14 horas 36 minutos y 15 segundos de competencia.

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