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Uruguay cayó ante México y ni siquiera consiguió el bronce

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La selección sub 22 de Uruguay frente a México en los Juegos Panamericanos. Foto: Reuters.
SUSANA VERA

JUEGOS PANAMERICANOS

La Celeste sufrió el gol de los aztecas cuando iban apenas seis minutos de juego y aunque dominó en el segundo tiempo no pudo empatar.

Uruguay llegó a Lima con la intención de retener la medalla de oro que había ganando en el fútbol masculino en Toronto hace cuatro años atrás. Sin embargo, ayer cayó ante México por la mínima diferencia en el partido por el tercer puesto y no pudo ni siquiera subir al podio.

Los celestes, dirigidos por Gustavo Ferreyra, regresan con las manos vacías. Y si el objetivo era repetir el oro y no consiguieron ni el bronce, lo sucedido en Lima huele a fracaso.

Tras haber ganado los tres partidos de la serie, aunque ante rivales mucho más débiles, los celestes fallaron en el partido en el que más concentrados debieron estar y mejor debieron jugar: frente a Argentina. No pudieron hacerlo y se quedaron sin la final. Una final que sí jugó ayer el modesto Honduras de Fabián Coito.

El partido de las víspera no comenzó bien para Uruguay. Gastón Álvarez cometió un grave error y Paolo Yrizar controló la pelota, quedó mano a mano con Santiago Mele y definió con un tiro cruzado.

A los celestes les costó acomodarse en la cancha tras ese mal incio. Jugaban nerviosos y siguieron cometiendo errores defensivos. Incluso México pudo haber ampliado la diferencia.

La más clara de los celestes en los primeros 45 minutos estuvo al final en los pies de Leonardo Fernández. Pero el arquero azteca la mandó al córner.

Las cosas cambiaron en el complemento. Uruguay salió dispuesto a hacer el gasto, fue más que los dirigidos por Lozano y mereció el empate.

A los 58u2019 Maximiliano Araujo sacó un zurdazo de afuera del área, pero el arquero se lució mandando la pelota al córner. Tras el tiro de esquina Bruno Méndez cabeceó pero el balón dio en el palo.

Luego tuvo el gol Darwin Núñez, pareció que la pelota se colaba contra un palo, pero se fue apenas afuera.

Hubo otro cabezazo de Méndez, uno de Juan Ignacio Ramírez que había ingresado, y un tiro libre de Darwin Núñez que salió muy alto. México jugaba desesperado y metido totalmente en su cancha. Y así con chances para los celestes y con los aztecas defendiéndose con uñas y dientes se fue el partido.

Uruguay terminó jugando con tres puntas y es cierto que un empate hubiera sido lo más justo. Pero no fue posible forzar el alargue y terminó en cuarto lugar. No pudo ni siquiera ganar la medalla de bronce.

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