DE VOLEA

DANIEL ROSA

Peñarol pasó este fin de semana la primera prueba exigente de las tres que tenía desde este domingo hasta el domingo 22 de abril, fecha en que se disputará el clásico. Al gran partido del fútbol uruguayo, pactado para la fecha 13 y que pinta para ser decisivo para el Apertura, Nacional llegará con la misma exigencia, pero con bastante más aire en todo sentido.
Para empezar, el tricolor ganó los tres puntos este fin de semana sin jugar porque enfrentaba a El Tanque. El aurinegro tuvo que esforzarse bastante para batir a Rampla.

El segundo desafío es la semana próxima, cuando el sábado enfrente a Fénix seguramente en el Centenario. Será el partido preclásico y, por venir corriendo de atrás a Nacional, la obligación es más para los dirigidos por Leonardo Ramos que para los de Alexander Medina, aunque éstos saben también la importancia de llegar arriba al clásico.

Y el tercer desafío será el clásico propiamente dicho, con el agravante de que unas horas antes esa semana visitará a Libertad por la Copa Libertadores, mientras que su tradicional rival aguardará descansado y preparando toda la semana el gran compromiso.

El Apertura es un mano a mano entre Nacional y Peñarol, aunque allí mirando todo desde una distancia prudencial está Defensor Sporting aguardando un empate clásico para acercarse.

Por eso, el clásico será clave, tanto como la forma en que lleguen Nacional y Peñarol a jugarlo.