Decían que se demoraba en los cambios, que dudaba demasiado, y el martes, en el partido ante Costa Rica, realizó dos variantes a los 36 minutos.

JOSÉ MASTANDREA

Querían que el maestro Tabárez renovara a la selección. Y lo hizo paulatinamente.

Querían que citara a futbolistas que no fuesen del "proceso" y lo hizo.

Pedían a gritos que se fijara en los jugadores del medio local, que terminara con la rosca, y desde el Mundial de Brasil hasta ahora, debutaron 12 futbolistas en la Celeste, entre ellos, Brian Lozano, Michael Santos y Nahitan Nandez, juveniles, que actúan en clubes del medio.

Ahora resulta que (como ya no hay nada más para criticarle al maestro) la selección "no juega a nada", no tiene "volumen de juego" y no sé cuántas cosas más.

Claro, los "criticólogos" se olvidan de agregar que esta selección ya no tiene a Lugano, al "Ruso" Pérez y a Forlán, y que por diferentes razones, no pudo contar con Luis Suárez ni con Edinson Cavani.

Hay mucho más para agregar. El trabajo invisible, ese que no está a la vista de todos, el del día a día, el cambio de perfil que se logró en la selección... pero ta: no sirve.

Desde el Arco