ESPAÑA

Cuando el partido estaba en el minuto noventa con Barcelona ganando 3-0, el uruguayo no aguantó la rabia de fallar una ocasión clave: terminó con la camiseta partida al medio y saliendo de la cancha por decisión propia.

No es una situación normal para Luis Suárez. Fue su undécimo partido en la temporada pero tan solo pudo anotar dos goles: el tercero en la goleada al Girona 3-0 y el quinto en el 5-0 ante Espanyol. El goleador fue desplazado de su lugar de influencia en el centro del área, pero también su imprecisión no es normal. Y él lo sabe.

La imagen de su mala racha fue este domingo en el minuto 90 de la victoria de Barcelona 3-0 ante Las Palmas, cuando al fallar una nueva ocasión clara se rompió la camiseta desde el cuello hasta la mitad.

A continuación abandonó la cancha pese a que no fue sustituido, expulsado y el partido aún no había acabado, incluso se perdió un corner final.

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Cabe señalar que se le fue mostrada una amarilla por un cruce con el arquero visitante, el argentino ex River Leandro Chichizola, pero el árbitro del partido no le mostró una segunda tarjeta.

De todas formas, pese a la falta de gol del "Pistolero" el Barcelona está en un arranque de temporada casi perfecto: ganó los siete partidos del comienzo de La Liga (récord para el club) y ambos de la Champions, con solo el debe de la derrota en la Supercopa de España. Además, el uruguayo aportó nuevamente con una asistencia que significó el 2-0.