ESPAÑA

El delantero le hizo seis goles al Real Madrid pero el de ayer en el Bernabéu es el más importante.

Viene caminando atrás del capitán del Girona, Granell. Se abraza con Peré Pons, que fue sustituido para el segundo tiempo y tuvo que ver la remontada desde el banco. Lo suelta, da un paso más, ve que en la puerta hay una cámara. Se acerca a ella y explota en euforia uruguaya: ”¡Vamo’!” grita Cristhian Stuani. El que empezó la remontada, sí. El que cada fin de semana se va ovacionado por los hinchas catalanes, pero también el que tuvo que soportar 14 partidos sin ganar en sus hombros, descubriendo que con sus goles no alcanzaba para sacar adelante al Girona y que necesitaban algo más para ganar.

El del domingo fue el sexto gol que Stuani le convirtió al Real Madrid en los 17 partidos que le tocó enfrentarse a ellos. Sin embargo, ese tanto de penal a los 65 minutos es el más importante que le convirtió al equipo blanco. Ese gol significó el inicio de una remontada que pondría fin a una sequía de 14 encuentros sin sumar de a tres. Eso en lo estadístico, pero no importa lo estadístico, porque esto es fútbol e importan los recuerdos y las emociones. Y los catalanes que viajaron a Madrid para ver el partido de ayer, regresaron a Gerona con un nuevo recuerdo para poner al frente de la lista de memorias imborrables de un hincha: la primera victoria ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu, y encima, de atrás.

Ese recuerdo estará asociado siempre a un delantero de Tala. Un jugador que se puso el equipo al hombro durante el período más complicado que les tocó vivir en La Liga. Un futbolista que anotó 13 goles, el 52% del total de su equipo y que en cada partido entró a la cancha pensando que era injusto estar tan abajo en la tabla, convertir tantos goles y que no alcancen para ganar.

Tanto tiempo llevaban sin terminar un partido siendo vencedores que lo que inicialmente iba a ser una campaña para buscar la clasificación a un torneo continental se convirtió en una lucha por no entrar en puestos de descenso. Y por eso se celebra así. Antes de este partido, mientras los catalanes viajaban a Madrid, el Girona estaba a un punto de entrar a zona de descenso. Ahora está a cuatro. Y por eso lo celebran así.

Dentro de unos años, algún viajero uruguayo pasará por un bar escondido en alguna calle de Gerona. Se va a sentar y le va a comentar a alguien sobre su nacionalidad. Entonces, el dueño del local se va a acercar, quizás con alguna lágrima en los ojos, y le va a contar en catalán la historia de su ídolo, un ídolo que no era una megaestrella, pero que era uruguayo y que no se rindió hasta ganarle al Real Madrid.

Goles a los grandes

Le anotó a los 5 máximos campeones de La Liga

En España, Stuani jugó en Albacete, Levante, Racing de Santander, Espanyol y Girona. En esos clubes le anotó seis goles al Real Madrid, cuatro al Atlético, cuatro al Athletic de Bilbao, tres al Barcelona y dos al Valencia.