Gastón Pereiro y Rodrigo Amaral, los pibes de “los US$ 15.000.000” y que son amigos en la vida, la rompen en la sub 20.

La vida los unió en 2011 y a 11.000 kilómetros de distancia. Todavía eran unos adolescentes que veían este presente futbolístico solo como un proyecto. Cuando transfirieron a Sebastián Coates al Liverpool de Inglaterra, el club hizo un convenio con Nacional y se llevó a entrenar por 10 días a cuatro chiquilines de las formativas. Entre esos nombres estaban Gastón Pereiro y Rodrigo Amaral, con 15 y 12 años, respectivamente, los mismos que hoy conforman una sociedad letal en la selección sub 20.

Rodrigo, dos años más chico que Gastón, lo tenía "de vista" y a partir de ese momento, comenzaron a forjar una amistad. "Nos conocimos allá (en Liverpool), tuvimos muy buena onda y después siempre seguimos en contacto por mensaje", cuenta.

Ayer, las declaraciones de Eduardo Ache sobre que estos chicos valen US$ 15.000.000 llegaron de inmediato al Complejo Celeste. "Hay que cuidarles las piernas que valen mucho", dijeron sus compañeros en broma.

Hoy la vida los tiene juntos otra vez, pero ahora dentro del terreno de juego. Ellos responden con talento y goles. Son cómplices, confidentes. Están siempre uno al lado del otro. Comparten la habitación y matan el tiempo a las risas mientras juegan al Play Station. Se conocen tanto, que en la cancha juegan de memoria. "Puede ser que influya algo de eso. De repente, a veces, cuando tengo la pelota sé en qué lugar se va a poner él", reconoce el delantero. "Por las características que tiene Rodrigo, nos podemos juntar a tocar y nos entendemos muy bien. Tiene una calidad bárbara y me pone muy contento lo que está viviendo. Si nos toca jugar juntos, como ahora, bienvenido sea y si no intentaremos ayudar al equipo cada uno desde su lugar", agrega el mediapunta.

El entrenador Fabián Coito se la jugó por el chiquilín de 17 años en el equipo titular y no defraudó. Se llevó todos los aplausos y formó una sociedad con Pereiro llena de goles y gambetas. Además, como si fuera poco, esta unión se dio en el Gran Parque Central. "Obviamente que eso es algo muy lindo. Si bien esto es la selección, soñé toda mi vida jugar en esa cancha y tiene un sentimiento especial", señala Rodrigo.

Asimismo, los amigos pudieron festejar junto a los colores que aman. Cuando Pereiro puso el segundo contra Paraguay, celebró el tanto sobre la cabecera Abdón Porte, junto al escudo de Nacional. Amaral fue el primero en ir a saludarlo y también se sumó al festejo. Los chiquilines, con una sonrisa de oreja a oreja, se llevaron una imagen para toda la vida. "Fue algo que salió en el momento, no estaba preparado. Justo se dio que el gol fue en ese arco y tenía pintado el escudo en el muro entonces salté el cartel y fui. Simplemente quería tener una foto ahí en agradecimiento a Nacional por todo lo que me ha dado. Si no fuera por el club capaz que hoy no estaba acá", contó el "10" y aclaró que los compañeros no les realizaron ningún tipo de reproche.

Siguiendo en esta línea, los socios con la celeste siguió la pretemporada de Nacional. Hicieron fuerza desde la Posta del Lago en los clásicos de verano y están en permanente contacto con los jugadores del plantel principal. "Tenemos un grupo en WhatsApp y siempre nos desean suerte antes de cada partido y nos felicitan también cuando las cosas salen bien. Siempre dan para adelante diciéndote que vas a hacer un gol o algo. Está muy bueno. Da confianza", explica Gastón.

Nacional los juntó en 2011 del otro lado del mundo. Cuatro años más tarde, la Celeste los puso de nuevo codo con codo. Son dos de las principales figuras que tiene esta selección sub 20 y el Sudamericano. Luego del mismo, tendrán la posibilidad de estar juntos, pero en el mismo plantel del equipo que son hinchas. El presidente sacó cuentas y les puso un precio. Ellos prefieren esperar tranquilos. Son orgullo nacional.

Consultados sobre las declaraciones del presidente Ache, los futbolistas prefirieron bajarle el perfil. "No lo voy a negar, siempre es lindo que hablen de uno de esa manera. Me pone muy contento, pero no podemos desviarnos de lo que estamos haciendo. Leí algo en Twitter sobre lo que dijo, pero la verdad es que no quiero pensar en eso. Ahora la cabeza está puesta acá, en el Sudamericano. Hoy lo único que quiero es ganarle a Colombia", explica Gastón.

Salvo el partido con Venezuela de la última fecha del Grupo B, donde Uruguay alineó con un equipo alternativo, estuvo en los otros seis partidos desde el vamos. Asimismo, fue sustituido en el complemento de todos los encuentros.

Es el máximo artillero de la selección junto a Franco Acosta. En total, anotó cuatro tantos. Le marcó dos a Chile en la primera fase en Maldonado y anotó dos más en el hexagonal final en Montevideo. Le hizo uno a Perú y otro a Paraguay.

Al margen de su rol goleador, también ha participado de manera más o menos directa en otros tantos de la Celeste. Hasta el momento cuenta con una asistencia en el tanto que le hizo Mauro Arambarri a Perú en el Gran Parque Central.

Participó en el proceso anterior de la sub 20 que terminó siendo vicecampeona del mundo en 2013 de la mano de Juan Verzeri. Estuvo en la preselección, pero no quedó en el plantel definitivo. Hoy tiene revancha como principal protagonista.

Debutó en la Primera División de Nacional el 28 de enero de 2014 ante Oriente Petrolero por la Copa Libertadores. En total, entre torneos locales e internacionales, acumula 35 encuentros. Además, ya lleva convertidos nueve goles.

No comenzó como titular aunque siempre tuvo mucha consideración por parte del entrenador. En total, jugó seis partidos. Ingresó desde el banco en cuatro ocasiones y jugó desde el vamos en los dos últimos choques.

En el encuentro ante Chile por la tercera fecha del Grupo B, ingresó a los 68 minutos por Gastón Pereiro y pudo anotar un tanto en la goleada Celeste por 6 a 1. Es el único gol que marcó hasta el momento.

Es el segundo máximo asistente de la selección con cuatro pases de gol. Tiene uno menos que Facundo Castro. Dejó de cara al gol a Mauro Arambarri ante Colombia, Franco Acosta frente a Perú y Paraguay y a Gastón Pereiro contra Perú.

Es el más chico de los 23 futbolistas que eligió Fabián Coito para disputar este Sudamericano. Junto con Ramiro Guerra son los únicos de la generación 1997. Recién cumplirá 18 años el 25 de marzo. Tiene edad para jugar en la próxima selección sub 20.

Una vez finalizado el Sudamericano, se integrará al plantel principal de Nacional. De esa forma, se sumará a los otros cinco futbolistas recién ascendidos de la cantera tricolor: Leandro Otormín, Felipe Carballo, Sebastián Gorga, Pablo Valim y Ayrton Boné.

SUDAMERICANO SUB 20ÁNGEL ASTEGGIANTE