La firma de un convenio entre Peñarol y Miramar Misiones formalizó un acuerdo con el que ambos apuntan a una meta común: el futuro.
En efecto, dirigentes de los dos clubes pactaron el alquiler del Parque Méndez Piana, que será cedido durante tres horas por día de lunes a viernes con el fin de que Peñarol lleve a cabo una tarea de captación enfocada a niños de entre 9 y 10 años, que —aunque más no sea en forma aleatoria— también le puede rendir sus frutos a Miramar Misiones, ya que podría incorporar a sus formativas algún botija por el que los aurinegros no opten.
Peñarol, por su parte, abonará un alquiler que rondará los 1.500 dólares mensuales, y prestará a Miramar Misiones varios jugadores, entre los que casi seguramente van a estar el arquero Washington Aguerre, el delantero Alejandro Siles y el lateral Raguso.
En el caso del primero de los tres, incluso, se trata de otra apuesta de Peñarol, en donde se tiene en cuenta que en seis meses o un año, muy probablemente, el futuro de Guruceaga estará en Europa.
Ante esa firme posibilidad, los aurinegros desean que Aguerre juegue y tenga rodaje, porque no pierden de vista que antes de la explosión de Guruceaga era el suplente de Migliore, y si el juvenil se llega a ir, el arco aurinegro puede ser suyo, como pareció alguna vez que faltó el argentino durante 2014.
PEÑAROLJORGE SAVIA