EN PARAGUAY

La exestrella del Barcelona y dela selección de Brasil, Ronaldinho Gaucho, rompió el  silencio que mantenía desde que cayó preso en Paraguay a principios de marzo  y dijo que lo primero que hará al salir de la cárcel es “darle un beso a su mamá”.

Dinho, explicó que su madre no está pasando los mejores momentos en su hogar a causa de la pandemia del COVID-19 y quiere ayudarla. Después se concentrará en la situación que vive y seguirá adelante “con fe y fuerza”.

"Con mi hermano quedamos totalmente sorprendidos al saber que los documentos no eran legales", dijo Ronaldinho, quien habló por primera desde su arresto en el hotel de Asunción donde cumple prisión domiciliaria desde principios de abril  "Desde entonces nuestra intención ha sido colaborar con la justicia para aclarar los hechos como vinimos realizando desde el principio. Desde ese momento hasta hoy, hemos explicado todo y facilitado todo lo que la justicia nos solicitó", agregó.

"Fue un golpe duro, nunca imaginé que pasaría por una situación así", reconoció Ronaldinho en una entrevista con  'ABC Color'. "Esperamos que puedan utilizar y confirmar todo lo que aportamos en cuanto a nuestra posición en el caso y que podamos salir de esta situación con la mayor brevedad posible".

Cabe recordar que el pasado 6 de marzo Ronaldinho y su hermano fueron arrestados en suelo paraguayo acusados de estar en el país con pasaportes falsos. Ambos han reiterado que recibieron los documentos en la sala VIP del aeropuerto Silvio Petirossi, en Luque.

Ronaldinho y su hermano viajaron a Paraguay para participar del lanzamiento de un casino 'online'  y para el lanzamiento del libro 'Craque da Vida',  evento que fue organizado con la empresa en Brasil que tiene los derechos de explotación del libro en Paraguay. "Todo lo que hacemos es en virtud de contratos que son gestionados por mi hermano que es mi representante", aclaró el exfutbolista.

Ronaldinho se refirió también a cómo fue su experiencia en prisión, donde obviamente se convirtió en el centro de atención para todos los reclusos. "Jugar al fútbol, dar autógrafos, fotos, es parte de mi vida, no tendría ningún motivo para dejar de hacerlo, mucho más con personas que estaban viviendo un difícil momento igual que yo", relató, dejando en claro a su vez, que todas esas personas le recibieron "con gran amabilidad".

Al final afirmó que se refugia en su "fe" para sobrellevar el momento. "Siempre hago mis oraciones para que las cosas salgan bien y ojalá que esto acabe dentro de poco".