Los resultados de los últimos 23 años tienen lecturas diferentes para los dos países del Plata, pero hoy hay una distancia enorme entre la AUF y la AFA.

La verdad del fútbol pasa por los resultados: los de todas las semanas, y los de las temporadas y/o los campeonatos.

Desde ese punto de vista, entonces, hay que convenir que la cosecha de títulos (2) logrados por Uruguay desde que hace 23 años Argentina ganó el último en la Copa América de 1993, no ha sido tan abundante; al menos para lo que es la rica historia del fútbol uruguayo.

En ese aspecto, la brecha a favor de "la Celeste" no es tan grande, porque Uruguay ganó dos ediciones de la Copa América, perdió la final en 1999 contra Brasil, y fue 4° en el Mundial de Sudáfrica, mientras que la vigencia de Argentina fue mayor, pues en 2004, 2007, 2015 y 2016 disputó cuatro finales continentales, y jugó la del Mundial pasado.

Sin embargo, el contexto dentro del cual se produjo una nueva postergación de Argentina en el desenlace de la Copa América Centenario, impulsa a tener un enfoque más amplio, y de revaloración de algunos aspectos del fútbol uruguayo de afuera de la cancha, cuya conclusión sería que la diferencia es "ancha como mar", parafraseando la descripción que se ha hecho siempre sobre las dimensiones del Río de la Plata.

Por ejemplo, más allá de los cuestionamientos propios de las defensas de los intereses locales, contrasta el equilibrio institucional bajo el cual transcurre el gobierno de la AUF, con el escandaloso vacío de poder que reina en la AFA.

A ese mismo nivel, resulta hasta chocante la polarización que existe entre la imagen directriz —e incluso personal— de Wilmar Valdez, presidente de la AUF, y Luis Segura, el titular de la AFA al que la FIFA apartó de su cargo después que la Justicia argentina lo procesara.

Según quedó expuesto en forma casi grosera en la Copa América Centenario, mientras la organización interna —y de soporte por parte de la AUF— de la selección celeste tuvo el orden que ha sido tradicional bajo el proceso encabezado por Tabárez, la logística referida a la albiceleste fue inexistente; o de cuadro de barrio.

En otro orden, Óscar Ruggeri le reveló a Ovación el viernes pasado, que "allá (Argentina) ni una de las selecciones juveniles está entrenando: el otro día fueron los chicos de la Sub 17 y cuando los vio Moschella (Rubén, director del complejo de Ezeiza), les dijo: ¿Qué hacen acá? A mí nadie me avisó nada, no hay ni comida, ¡no tengo plata!"; por contrapartida, en el Complejo Celeste, la Sub 15, la Sub 17 y la Sub 20 entrenan todas las semanas con la presencia de Tabárez, el Prof. Herrera, Otero y Rebollo, y las dos primeras hasta juegan partidos internacionales.

Por último, en lo que refiere al funcionamiento de AUF y AFA: los nombramientos de José Luis Corbo, Sebastián Bauzá y Wilmar Valdez se hicieron con procesos legítimos y claros, mientras que el intento trunco de designar al sucesor definitivo de Julio Grondona en diciembre pasado terminó en forma bochornosa y fraudulenta; tanto la AUF como la AFA viven situaciones económicas difíciles, pero los motivos son ajenos a la cúpula de la primera, mientras en el caso de la segunda hubo conductas delictivas de directivos a los que la Justicia ya ha condenado; y al tiempo que acá está fijado el inicio del Uruguayo para el 6 de agosto, en Argentina no se sabe qué campeonato se jugará, qué equipos lo disputarán y hasta en qué ámbito: en la Súper Liga, adentro o afuera de la AFA.

La diferencia, pues, aparte de los resultados, es grande. Una brecha ancha como mar; o como el Río de la Plata.

El Ejecutivo de la AUF está en funciones. En la AFA, en cambio, el presidente Luis Segura fue apartado del cargo por la FIFA y procesado por la Justicia, mientras que dos de sus tres vicepresidentes, Rodolfo DOnofrio (River Plate) y Marcelo Tinelli (San Lorenzo), y el tesorero Matías Lammens, han renunciado.

El déficit de la AUF depende en gran parte del dinero no cobrado por la decisión judicial que "congeló" el pago de Full Play por los derechos de TV; el desvío de buena parte de 5.600 millones de pesos argentinos que pagó el gobierno por "Fútbol para Todos" es una de las causas del descalabro económico de la AFA.

No hay clubes de la AUF en la Copa. Boca Jrs. está en semifinales; pero...¿podrá jugarlas? Una jueza pidió que AFA desoiga la medida de FIFA que sacó a Segura y corre riesgo de ser desafiliada. Hugo Moyano no quiso hacerle caso y le dijo: "Cuando no haya fútbol, ¿le decimos a la gente que vaya a su despacho?"

Argentina llegó a Houston y debió esperar en el lobby del hotel: las habitaciones no estaban preparadas. En Uruguay, R. Pastoriza, E. Belza, J. Herrera y M. Rebollo fueron a EE.UU. un mes antes, como siempre, y en cada lugar de alojamiento celeste dejaron hasta cuáles serían cada una de las cuatro comidas diarias.

Uruguay llevó 23 futbolistas a la Copa América y con ellos hizo sus prácticas. Argentina igual; pero, como estila, apeló a jugadores locales para enfrentar a los titulares y, como en EE.UU. es más popular el fútbol femenino, debió utilizar a mujeres como "sparrings".

Los dirigentes de AFA fueron y vinieron durante la Copa América, y quien acompañó a Lavezzi a operarse en Nueva York fue Juan C. Crespi, ex presidente de selecciones, que había sido cesado. Valdez y Pastoriza estuvieron siempre al frente de la selección celeste.

Las designaciones de los presidenres de la AUF han sido todas por votaciones cristalinas. Cuando se hizo la elección para suceder a Grondona en la AFA, con Segura y Tinelli como candidatos, y se anuló: había 75 asambleistas y contaron...¡76 sufragios! Segura dijo: "Fue 38 a 37, pero no sabemos para quién".

Por "Fútbol para Todos", AFA recibió de los gobiernos "K" $ 5.600 milllones en 6 años; con fin también político, evitar el poder del sindicalista Hugo Moyano, hoy Macri impulsa la Súper Liga, dentro o fuera de AFA. La AUF no tiene aportes oficiales y, en temas como la seguridad, no se cree apoyada por el Estado.

FÚTBOLJORGE SAVIA