URUGUAYO

Dicen que el fútbol, como la vida, da revancha y Giorgian De Arrascaeta debe haber encontrado parte de ella el sábado cuando en Lima, su Flamengo venció a River Plate en la final de la Copa Libertadores.

Hace siete años, también en Lima, el habilidoso volante de Nuevo Berlín enfrentó al Millonario en la final de la Copa Libertadores, pero no tuvo la misma suerte.

Un De Arrascaeta todavía adolescente disputaba la Copa Libertadores Sub 20 luciendo los colores de Defensor Sporting frente al que iba a ser su verdugo en Maturín, la casa de Alianza Lima.

Una vez más en la capital peruana, el fútbol enfrentaba al “Cocho” y al elenco argentino, aunque esta vez la historia iba a ser distinta porque quien se alzó con el trofeo fue él.

“Era un sueño que tenía desde chico. Ganar una Copa Libertadores y quedar en la historia de este gran club y quiero felicitar a mis compañeros que hicieron un gran trabajo”, expresó Giorgian a la cadena Bein apenas había finalizado el encuentro.

Ese sueño de levantar una Libertadores, si bien era Sub 20, que le había arrebatado River Plate lo pudo conseguir también frente al mismo rival.

Aquella noche del 2 de julio de 2012, Fernando Curutchet alineó hombres como Matías Malvino, Emilio Zeballos, Ángel Rodríguez, Federico Gino, Diego Laxalt o el propio Giorgian de Arrascaeta, parte de una camada violeta que luego tuvo su desempeño en las canchas de Primera División.

Por el lado de River Plate había jugadores como Gaspar Servio, Eder Álvarez Balanta, Facundo Quignon, Juan Cazares, Matías Kranevitter o Augusto Solari, siendo precisamente este último quien anotó el gol para el 1-0 de la victoria del equipo argentino.

Hasta ese momento, un pelilargo Giorgian de Arrascaeta había sido de lo más destacado en el certamen donde Defensor pasó como líder la llave en la que enfrentó a Alianza Lima, Independiente José Terán y Blooming, luego eliminó a Universitario en cuartos de final y a Unión Española en semis para llegar a la final.

Pero en 2012 no fue la única vez que River Plate fue verdugo de Giorgian de Arrascaeta, porque tres años después en la Copa Libertadores el Millonario eliminó al volante uruguayo que por ese entonces jugaba en Cruzeiro.

Con un global de 3-1 los dirigidos por Marcelo Gallardo dejaron afuera al equipo de Belo Horizonte en los cuartos de final abriendo camino para luego consagrarse frente a Tigres de México.

ALEGRÍA. Pero la historia fue distinta en 2019 ya que el volante uruguayo se pudo tomar revancha y festejar con una gran asistencia incluida en el primer gol de Gabigol.

“Hay que seguir por este camino con humildad que se van a venir cosas importantes”, declaró Giorgian agregando que “este grupo se merecía un título de esa magnitud por lo que veníamos haciendo durante todo este año”.

Flamengo lo consiguió y Giorgian fue gran gestor de que el equipo de Río de Janeiro celebre, así como también festeja el volante de ganar un título para enmarcar, que le sirvió para sacarse una espina y tener la revancha frente a River Plate.