EUROCOPA

República Checa dio la campanada al derrotar por 2-0 al equipo de Países Bajos que pagó caro quedarse con diez al inicio del segundo tiempo, en octavos de final de la Eurocopa, este domingo en el atestado Puskas Arena de Budapest.

Tomas Holes marcó de cabeza el primer gol checo (68) y el delantero Patrik Schick, en su cuarto tanto en la competición, sentenció poco después (80).
Esos dos goles llegaron cuando Países Bajos estaba ya con diez hombres desde el minuto 52, por una expulsión por mano de Matthijs De Ligt.

El rival de República Checa en cuartos de final, el sábado en Bakú, será Dinamarca, que eliminó durante la víspera a Gales con un contundente 4-0.

"Este fue uno de los mejores partidos de mi vida. Sabíamos que ellos son los favoritos, así que tuvimos que dar el máximo en el partido", dijo Silhavý.
El entrenador checo opinó que los neerlandeses "eran buenos aún con 10 jugadores", pero los checos lograron robarle espacio a la selección naranja.