El club estableció cláusulas de rescisión prácticamente impagables por sus cracks: 1.000 millones de euros para Ronaldo, Benzema o Bale

Real Madrid nunca sufrirá una partida imprevista como la de Neymar, gracias a un truco de su presidente Florentino Pérez: la “cláusula anti jeques”, como él mismo la llamó. El dirigente se dio cuenta que los petrodólares iban a provocar una enorme inflación en el mercado, por lo cual estableció cláusulas de rescisión prácticamente impagables para sus futbolistas. Si el PSG o cualquier otro club con petrodólares quiere llevarse a Cristiano Ronaldo, por ejemplo, tendrá que pagar 1.000 millones de euros, informó ABC. La misma suma fue puesta para blindar los contratos de Karim Benzema y Gareth Bale.

Las cláusulas de Kroos y Luka Modric ascienden a 500 millones, en tanto las de Dani Carvajal o Marco Asensio valen 350 millones. Casemiro, Keylor Navas, Raphaël Varane, Sergio Ramos y Marcelo están en el siguiente escalón, con 200 millones.

La cláusula de rescisión es un mecanismo para resolver de forma unilateral un contrato en el fútbol español. Hasta 1985, los clubes podían retener indefinidamente a sus futbolistas si le aumentaban su salario un 10% anual. Ese año, un decreto estipuló que si el jugador quiere romper su contrato puede poner una cláusula pactada de indemnización para hacerlo. El primero que lo hizo fue Francisco Llorente, que fijó esa suma en 50 millones de pesetas, lo cual le permitió irse del Atlético Madrid al Real Madrid.

ESPAÑA