Juan Ignacio Ruglio pide licencia en Peñarol y viaja a Europa con un proyecto para hacerlo realidad.

Ignacio Ruglio pidió licencia por un mes como integrante del Consejo Directivo de Peñarol en representación de "Sentimiento 1891" y parte el próximo sábado a Europa en un viaje de 23 días, "que voy a hacer por descanso; pero, a la vez, para aprender lo que más me gusta, que es el manejo de los clubes de fútbol".

En ese sentido, Ruglio precisó que irá a España, Italia, Grecia y Francia, en donde ya tiene agendadas reuniones con altos directivos de Real Madrid, Barcelona, Atlético de Madrid, Juventus, Lazio y Paris Saint Germain, ya que "hace mucho tiempo que quiero especializarme en el manejo de grandes estadios, porque los grandes estadios del mundo hoy ya no son más lugares donde sólo se juega al fútbol".

De todas formas, ese no es el único objetivo que lleva el consejero aurinegro, que viaja con la intención de presentar en la directiva de su club las ideas e iniciativas que pueda recoger en Europa, hacia donde vuela con otra meta por la que también hace tiempo que viene realizando contactos y gestiones: "Voy a presentarme y generar vínculos con dos propósitos: uno es elevar la mira para ver cómo se puede hacer para poner de nuevo a Peñarol en el primer plano del fútbol internacional, y el otro es el de generar posibles visitas a América de los grandes clubes de Europa".

En ese aspecto, Ruglio recalcó que "yo no viajo a buscar un gran rival para la inauguración del estadio de Peñarol, ese es un resorte del presidente (Damiani), y no puedo ir en nombre del club por ese tema, pero voy a tender los puentes para que en algún momento Real Madrid o Barcelona vengan, sino es para inaugurar el estadio de Peñarol, por lo menos a un amistoso".

El dirigente reveló sobre ese se tópico que "hay un proyecto en el que estoy trabajando hace mucho, y por el que hablé en Río de Janeiro y en Buenos Aires cuando la final de la Libertadores: en Uruguay, por el tamaño y las pocas posibilidades de esponsoreo, lo que podemos hacer es organizar una gira de Real Madrid o Barcelona por Argentina,Brasil y quizá Chile, y por ser los que lo fuimos a buscar, licuamos el costo del partido inaugural del estadio de Peñarol o el que se podría jugar allí, entre los que se van a disputar en esos otros países. América no tiene el potencial de China, EE.UU. o la India, que pagan fortunas por llevar a Real Madrid y Barcelona, pero tiene el lugar al que ellos prestan más atención, porque es de donde salen y sacan los mejores jugadores".

Juan Ignacio Ruglio va a ir a Italia, y en dicho país visitará la ciudad de Pinerolo, "desde donde vino Juan Bautista Crosa en 1805". El dirigente señaló que "yo me escribí con la alcaldesa (de Pinerolo), por lo que ella y varios representantes de las fuerzas vivas me van a estar esperando: voy a traer semillas del árbol típico de la zona para plantar en el futuro estadio de Peñarol. Eso va a ser historia pura".

En su intento de especializarse en el manejo de los grandes estadios, Ruglio no pudo con su genio "manya" y concretó una idea folklórica, pero que para Peñarol tiene un significado especial: "Conseguí la grabación de una vieja locomotora arrancando y tocando pito, para que cada vez que Peñarol salga a la cancha en su estadio, el audio por los altoparlantes haga escuchar el arranque de la locomotora".

El consejero que representa al sector denominado "Sentimiento 1891" va a presentar en directiva una iniciativa para que "la tribuna popular a donde irá la hinchada visitante en nuestro estadio, se llame Decano 1891, lo que hará que esos hinchas tengan impreso en sus entradas durante toda la semana, el nombre con el que siempre se nos conoció en el Uruguay y en todo el mundo".

PeñarolJORGE SAVIA