FRANCIA

El entrenador uruguayo ganó en su primer partido en el Girondins de Bordeaux, nada menos que ante el escolta Olympique de Lyon. Ahora el PSG del delantero charrúa es más líder que nunca.

El debut del uruguayo Gustavo Poyet como entrenador del Girondins de Bordeaux se saldó este domingo con el triunfo del equipo ante el Lyon por 3-1, en la 23ª jornada de la Ligue 1.

El brasileño Malcom, que parecía tener pie y medio en el Arsenal hasta la llegada esta semana de Poyet, que le ha convertido en pieza clave de su proyecto, agradeció la confianza de su técnico con un gol, de penal a los 27 minutos de partido.

El marcador lo había abierto cinco minutos antes Nicolas de Préville y el tercero del Bordeaux lo anotó, también desde el punto de penal, Gaëtan Laborde, justo antes de la pausa (45+2).

Poco antes, el brasileño Marcelo había recortado diferencias para colocar el 2-1 provisional en el marcador, con su primer gol en la Ligue 1.

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El Lyon ni siquiera se benefició de jugar el último cuarto de hora en superioridad, tras la expulsión del brasileño Otavio en el minuto 77 de partido.

"El primer tiempo fue mejor de lo que esperaba. Fuimos fuertes, la organización fue buena... y a veces necesitas también la suerte de tu lado", declaró tras el partido el técnico uruguayo.

"Nuestra segunda parte ha sido sobre todo mental para tratar de no cometer errores", añadió el técnico, que calificó de "espectacular" el ambiente en el estadio bordelés.

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"El resultado va a ser importante para los otros partidos", predijo Poyet, que anunció que tras el triunfo invitará a cenar a toda la plantilla para celebrarlo.

Una semana después de derrotar al líder PSG, el Lyon deja vía libre al Marsella o Mónaco, que cerrarán la 23ª jornada, para que se coloquen segundos en la Ligue 1 aunque lejos del líder parisino.

La derrota del Lyon hace, además, que el PSG, que el sábado derrotó por 4-0 al Montpellier, aumente su diferencia al frente de la clasificación de la Ligue 1, con 59 puntos, por los 48 del OL, los 47 del Marsella y los 46 del Mónaco, antes de que estos dos equipos se enfrenten en el Velódromo marsellés.

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Bordaux significa el sexto equipo para el entrenador uruguayo, que nunca dirigió a dos clubes en la misma liga.

"Gus" comenzó su trayectoria en el banco al estar al frente de Brighton & Hove Albion entre 2007 y 2013, llevándolo a la Championship (segunda categoría). Luego tuvo su oportunidad en la Premier League con el Sunderland entre 2013 y 2015, pero los malos resultados los sacaron del equipo.

El mismo año tomó al equipo griego AEK Atenas al cual dirigió hasta 2016. Tuvo un breve pasaje por Betis, uno de sus clubes como entrenador, en el mismo año donde "no salió bien" según afirmó el propio Poyet. 

Finalmente, dirigió al Shanghái Shenhua entre 2016 y 2017 con resultados que no eran los esperados.

En el Girondins de Bordeaux asumió el pasado lunes 22 de enero y en su primer semana logró un importante triunfo para comenzar con el pie derecho.