La Premier volvió a quedarse sin equipos en Europa, a pesar de su poderío.

La caída del Manchester City, que se une a las anteriores del Chelsea, Arsenal y Liverpool, constata la escasa pujanza de la liga europea de mayor poderío económico: la Premier League.

Inglaterra, país de fútbol y tradición, de contrastadísima trayectoria naviera, se le hincha el pecho cada vez que se menciona su campeonato. Modélico en mucho aspectos, el capital extranjero y las grandes fortunas de oriente atrajeron a las grandes estrellas, que encuentran un hábitat perfecto para desarrollar sus carreras, y potenciaron las estructuras de algunos clubes que hasta hace no mucho tenían polvo en las vitrinas.

La Premier League, presumen en las islas, es el modelo, el marco ideal, dicen allí. Ocurre, sin embargo, que esa estratosférica inyección económica y la confección de un torneo de innegable atractivo, envuelto de espónsores potentes y el romanticismo inglés, no tiene reflejo en la competitividad de sus equipos en el continente. De nuevo, un año más, naufragio.

Es la segunda vez, en tres años, que un equipo inglés no se clasifica para los cuartos de final de Champions. En la temporada 2012/13 no hubo clubes de la Premier en esta ronda y este curso se ha repetido la historia, circunstancia que no se había producido antes desde 1996. Uno tras otro y por este orden: Liverpool, Chelsea, Arsenal y Manchester City. Todos ellos han caído en la criba que marca la línea de los cuartos.

El fútbol inglés en la máxima competición continental queda a menudo al desnudo. Pese a la captación de ideas, estilo y talento, a la importación a golpe de talonario, sus costuras quedan al descubierto. También en este curso. El hundimiento es un hecho.

Con los paréntesis de los triunfos del Liverpool (2005), M. United (2008) y Chelsea (2012), el fútbol inglés en la Champions queda a menudo minimizado. Hace dos años tampoco llegó ninguno a cuartos. De poco han servido las fortunas de los jeques y sus mandamás. Un italiano (Juventus), un alemán (Bayern), un portugués (Oporto), dos franceses (PSG y Mónaco) tres españoles (Barcelona, Atlético y Real Madrid) estarán en el sorteo de hoy (8:00 horas). Ni rastro de la Premier League en el día en el que comienza la lucha entre los ocho mejores de Europa.

Tras la marcha de Suárez, el club de Anfield llevó a cabo una inversión descomunal: 152 millones de euros para reclutar a Lallana, Lovren, Markovic, Balotelli, Alberto Moreno, Origi, Can y Lambert. Entre todos ellos no han logrado llenar el gigantesco vacío que dejó el uruguayo en la entidad del Merseyside. Sólo ganaron un partido en la fase de grupos de la Champions y Basilea clasificó junto a Real Madrid.

Era uno de los aspirantes al título con Mourinho en el banco (el DT lleva 8 semifinales en las últimas 11 ediciones) y en la fase de grupos se paseó ante rivales algo menores (Schalke, Sporting y Maribor). Después llegó la gran bofetada ante su público: tras arañar un empate en París, el PSG le derribó después de jugar casi todo el duelo de vuelta con un hombre menos por la expulsión de ‘Ibra’.

Es la historia de nunca acabar, el Día de la Marmota para los gunners. Los 120 millones de euros desembolsados el pasado verano (Alexis Sánchez, Chambers, Welbeck...) no transformaron la dinámica del equipo de Arsène Wenger, que por quinto año consecutivo cayó en octavos. Clasificó tras el Dortmund y Mónaco se lo merendó en la ida y le resistió en la vuelta. Otro fiasco.

Un gigante sin alma.

Crece la relación de estrellas: Silva, Touré, Agüero y tantas otras. Crece el millonario proyecto, moldeado por el sugerente libreto de Pellegrini, pero el equipo hace aguas lejos de la Premier. Aunque ayuda, la cartera no garantiza el pedigrí, y algo así le ocurre al City. En la fase de grupos casi se queda afuera y el Barça lo eliminó en octavos, como el año pasado. Peor fue en 2012 y 2013: afuera en primera fase.

CHAMPIONS LEAGUEALEJANDRO CIRIZA - EL PAÍS DE MADRID