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Peñarol volvió a dejar puntos y ya perdió la brújula

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Gastón Rodríguez. Foto: Francisco Flores.

TORNEO CLAUSURA

El aurinegro empató con Racing 3-3 en Las Piedras y sigue en caída libre: quedó a siete puntos de Nacional en el Clausura y a ocho en la Anual.

Un triunfo en los últimos cuatro partidos marcan el pésimo presente deportivo de un Peñarol que mira sin reacción cómo Nacional no para de ganar (lleva ocho triunfos consecutivos) y estira diferencias en el Torneo Clausura y la Tabla Anual.

Después de la bocanada de aire fresco que el equipo de Diego López había tomado tras ganarle a Wanderers en el Estadio Campeón del Siglo y recuperar parte de lo perdido en cuanto al juego y sobre todo, la actitud, lo mostrado ayer en Las Piedras no fue ni por asomo lo que puede dar un plantel como el aurinegro.

Es que para empezar, después de dominar en el inicio del encuentro, los errores defensivos se adueñaron de la zaga y Racing abrió la cuenta, pero después le perdonó la vida a un equipo que no ofrecía garantía alguna en la última zona en la que extrañó demasiado a Fabricio Formiliano, ausente por una contractura muscular.

Vino el repunte y fue más en base a ganas que fútbol porque el sistema ya no funcionaba, algunos jugadores no respondían y volvieron a desperdiciar la chance que el entrenador les dio.

A los 27’, Germán Ferreyra lo bajó a Lucas Viatri en el área. Penal y expulsión para el lateral de Racing. Gol del argentino y con un hombre más, todo hacía suponer que Peñarol lo iba a pasar por arriba a un conjunto cervecero que cada vez que pisaba campo carbonero generaba peligro con el juego de Nicolás Sosa y Michael Araújo, sus figuras.

En el complemento vino lo mejor del partido. Apareció Matías De los Santos y con un golazo puso en ventaja a Peñarol a los 51’.

Pero otra vez los errores defensivos estaban a la orden del día. Esta vez en la pelota quieta: córner de Ignacio Nicolini y cabezazo goleador de Sosa.

Con el 2-2, Racing se animaba, veía que podía porque su rival no reaccionaba y fue así que a los 73’ y ante la pasividad de toda la zaga aurinegra, Michael Araújo definió ante Kevin Dawson para poner el 3-2 del cervecero.

La tribuna se venía abajo. Las caras eran de absoluto desconsuelo en Peñarol, pero otra vez apareció Matías De los Santos. El pibe se puso el equipo al hombro: las pidió todas, marcó, quitó, jugó y a los 75’ sacó un zapatazo que dejó sin asunto a Irazún para el definitivo 3-3 entre Racing y Peñarol en el Parque Artigas de Las Piedras.

El momento de Peñarol es crítico. Ya perdió la brújula y el camino de la tranquilidad y los triunfos no aparece. El carbonero volvió a dejar puntos y cada vez más se aleja de Nacional en las dos tablas.

Matías De los Santos. Foto: Francisco Flores.
Matías De los Santos celebra uno de sus golazos frente a Racing. Foto: Francisco Flores.
LO MEJOR

Matías De los Santos, la figura de Peñarol

Venía pidiendo pista hace varios partidos y Diego López lo fue llevando de a poco. El volante juvenil de 21 años no defraudó. Fue titular en un partido clave frente a Wanderers con una destacada actuación en la mitad de la cancha y ayer en Las Piedras se puso el equipo al hombro cuando nadie respondía ni sacaba la cara por Peñarol. La buscó, la pidió, corrió, marcó, quitó, la jugó y fue autor de dos golazos que sostuvieron el resultado para un equipo aurinegro que volvió a dejar una mala imagen pero que tuvo en De los Santos a su gran figura. 

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