Con Nicolás López, Leandro Barcia y Sebastián Fernández del lado tricolor y con Michael Santos y Nicolás Schiappacasse del de River, había muchas expectativas de goles.

Sin embargo, no hubo ninguno. Y las palmas no se las llevó precisamente ningún delantero, sino más bien los defensas. Dentro de ese panorama, los arqueros se destacaron por la seguridad que brindaron. Conde tuvo tres grandes tapadas y Nicola Pérez dos tremendas intervenciones ante una media vuelta de Sebastián Fernández primero y una tijera de Kevin Ramírez luego. Empero, hubo un futbolista que brilló por encima de los demás y no solo porque defendió bien, sino porque atacó mejor: Alfonso Espino.

Tuvo un ida y vuelta admirable, realizó buenos cierres, dominó a Michael Santos y cuando se fue arriba mostró una gran evolución. Su punto flaco eran los centros, los que tiraba casi indefectiblemtne afuera, pero anoche ello no ocurrió. Acertó sus envíos al área, fue salida y cuando se descolgó tomó casi siempre la mejor opción. Participó en dos jugadas clave: el pase filtrado para el gol de Barcia que el árbitro no convalidó y luego definió él, en el área pequeña, para anotar un gol bien anulado porque estaba en posición adelantada.

La gente premió al lateral zurdo con una ovación cuando se fue por el túnel.

COPA LIBERTADORESDANIEL ROSA