Real Madrid sufrió pero se metió en cuartos de final, igual que Wolfsburgo.

Real Madrid y Wolfsburgo se convirtieron en los primeros equipos en llegar a los cuartos de final de la Champions League 2016 al ganar sus respectivos compromisos y haciendo buena la ventaja que ambos ya habían cosechado en los duelos de ida.

El encuentro de Alemania tuvo menos emoción, por fortuna para los locales, que debían hacer bueno ante el Gent el 3-2 que se trajo de Bélgica. Con un gol de Schürrle , el Wolsfsburgo ganó 1-0 y sigue adelante en su aventura continental, liderada por jugadores como el citado ex del Chelsea, el joven atacante Draxler y los brasileños Luiz Gustavo y Dante. Bastante peor lo pasó el Real Madrid, a pesar de que ganó por 2-0 a la Roma, repitiendo el resultado de la ida y de que terminó logrando el pase sin recibir goles.

Los romanos acudieron al Santiago Bernabeu con firmes intenciones de dar vuelta la serie y si no lograron por lo menos acercarse fue por la falta de puntería de sus delanteros en los momentos decisivos y por las atajadas milagrosas del costarricense Keylor Navas, que con ellas cada día entierra un poco más la todavía reciente salida de Iker Casillas. El que más ocasiones de gol erró fue, para desesperación de Spalletti, el egipcio cedido por el Chelsea, Mohamed Salah. En especial un mano a mano en el inicio de la segunda mitad que terminó afuera y que estuvo a centímetros de cambiar el guión de la película. Acciones que por momentos hicieron temer a la hinchada local por la vigencia de la maldición que arrastraba: desde 1987 no ganaba el Real una eliminatoria ante un club italiano. Para tranquilidad de los de Zidane, Cristiano Ronaldo y James Rodríguez terminaron solucionando el duelo con sus goles y poniendo fin a esa mala racha.

Sin embargo, el Bernabeu, que ovacionó a Francesco Totti en el que seguramente fue su último partido de Champions, se fue con la agridulce sensación de que si el equipo no sube su nivel a partir de cuartos de final, el recorrido de su equipo en el último torneo al que aspira esta temporada podría durar poco.

FÚTBOL INTERNACIONALJORGE ALDEA