El volante creativo contó en entrevista para la página del PSV que al principio tuvo que acostumbrarse a Holanda, pero que ahora ya se siente como en casa. Además, se acuerda de su país, Nacional,Recoba y habla de cómo es jugar en la Champions League.

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Gastón Pereira emigró a Europa a principio de temporada para iniciar su camino en el PSV Eindhoven con un montón de desafíos por delante. No solo era su primera experiencia en en "viejo continente", sino que se afrontaba a acostumbrarse a estar lejos de su casa, de sus amigos y familia, además de la barrera del idioma. En conclusión, una nueva vida.

"Me sigo acostumbrando", dijo el uruguayo mientras explicaba que al principio su padre viajó con él a Holanda, aunque sus compañeros en el PSV lo ayudaron: "me recibieron muy bien", dijo.

Sin embargo, lo que dejó atrás no fue solo familia y amigos. Pereiro no se olvida del club de donde hizo las actuaciones destacadas que le valieron el pase a Europa y no duda al contestar cuando le preguntan: "De Nacional soy hincha desde chico, mi padre me hizo hincha y juego desde los 12 años allí. Es el club que amo y me ayudó a crecer. Sigo mucho los partidos", afirmó.

De todas formas, una aspecto que facilitó su adaptación fue el hecho de hablar en su idioma en el vestuario, algo que puede hacer nada menos que con Phillip Cocu, el entrenador del equipo: "Por suerte habla español, y algunos compañeros también", comentó a la vez que agregaba: "si no sería muy difícil para poder comunicarme. Me ayuda mucho".

Tras recordar la final de la Copa Intercontinental de 1988, que precisamente jugaron Nacional y PSV, Pererio habló de lo que fue su debut oficial en el equipo holandés y el inolvidable partido en el que le rompieron la nariz. "Son cosas del fútbol. Por suerte no me pasó nada, no me perdí ningún partido", cuenta el enganche.

"Hace poco tiempo miraba la Champions League por la tele y ahora tengo la oportunidad de poder jugarla", dijo el extricolor, a la vez que no tenía dudas en afirmar que "es la competencia de clubes más importante".

"Desde pequeño era mi ídolo. Después, en Nacional, cuando a mí me suben a Primera él estaba jugando ahí", cuenta Pereiro. "De un día al otro lo tenía al lado como compañero", añade. Sin embargo, piensa que "tengo que trabajar mucho para tener su carrera... pero con la mitad me conformo".

"Por suerte pude jugar", comentó Pereiro, quien fue titular a pesar que hasta ese momento nunca lo había sido. El uruguayo cumplió y anotó los dos goles con los que el PSV le pudo ganar a su rival: "Se dio un partido completo: pudimos ganar con el trabajo de todos", agregó.

"Ahora ojalá que pueda tener más minutos. Cuando el entrenador me diga de jugar trateré de aprovechar y jugar lo mejor posible", cerró sobre lo que respecta a su futuro inminente.

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