DUBAI

Jugadores, técnico e institución se llevaron la mayoría de los galardones en los Globe Soccer Awards 2017.

Se entregaron ayer en Dubai los Globe Soccer Awards 2017. La Liga española, Real Madrid y Cristiano Ronaldo fueron los grandes protagonistas de la jornada.

Real Madrid se llevó el premio al mejor equipo del año y Zidane fue el encargado de recoger el galardón. “Quiero decir gracias, represento al club y a su presidente. Es un honor para mí y para el club. Significa que las cosas funcionan. Gracias”.

El técnico francés también se quedó con el premio al mejor entrenador, por delante de Allegri, Conte y Mourinho. “Gracias por este premio. A mi presidente y al Real Madrid por darme la oportunidad. Todos los jugadores son increíbles, los felicito a todos ellos. Esto es por ellos no por mí. Gracias también a todos los entrenadores. He ganado muchas cosas, pero es un trabajo muy difícil. Por último y lo más importante pienso en todas las madres del mundo”.

Y el premio al mejor jugador fue para Cristiano Ronaldo, quien superó a Messi, Neymar, Sergio Ramos, Mbappé, Buffon y Dybala. “Tengo mucho espacio para los premios. Para mí es un momento especial, me siento muy feliz por este premio. Gracias a mis compañeros, a mi entrenador, al Real Madrid. Fue un año increíble donde ganamos muchos títulos. Gracias a los que me votaron, el año que viene haced lo mismo”, finalizó el portugués un poco en broma y otro en serio.

Para completar la gran noche española, la Liga Santander ganó el premio a mejor Liga del mundo y subió Javier Tebas a recoger el galardón. “Estoy muy feliz por este premio que es para todos los equipos españoles y también para los jugadores y entrenadores españoles”, dijo el presidente de la LFP.

Carles Puyol y Francesco Totti se llevaron el premio a la trayectoria deportiva. “Durante casi 20 años he hecho lo que más me gusta: jugar al fútbol. Un deporte que me lo ha dado todo y ahora quiero devolvérselo”, dijo el ex del Barcelona.

Finalmente, el premio a la trayectoria como entrenador fue para el italiano Marcelo Lippi, que recibió el trofeo de manos de Francesco Totti.