DE VOLEA

La primera fecha del Clausura confirmó en cierta forma lo que en notas previas al inicio del torneo había publicado Ovación: este torneo tiene buena pinta para Nacional. Técnicos y exfutbolistas habían concluido eso, en tanto los preparadores físicos lo habían insinuado al señalar que, en virtud de la seguidilla de partidos, sacarán ventaja los equipos con planteles más extensos, es decir los grandes.

Habrá varias fechas entre semana, empezando por la de mañana y pasado. Eso hace que, citando al profesor Antonio Tchadkijian, “hay que recuperar más que trabajar”. Por lo tanto, la cuestión no pasará tanto por los táctico sino más bien por lo físico y lesiones va a haber. Los equipos que las disimulen mejor con sus reemplazos, tendrán una ventaja.

Partiendo de la base de que Nacional y Peñarol tienen planteles largos, ¿por qué el tricolor sería el favorito? Porque tiene un grupo de jugadores más sano. Una vez más los aurinegros sufrieron bajas por lesiones en el primer partido (Lores y Canobbio) y los antecedentes del año muestran que Cristian Rodríguez, Walter Gargano y Guzmán Pereira se perdieron muchos juegos cuando había doble actividad entre lo local y las copas. Y cuando faltaron, Peñarol los extrañó.