FÉNIX

Carlos Fernández, “Muma”, se prepara para ser titular por cuarta vez en Fénix. Esta mañana los de Capurro enfrentarán a Danubio en el María Mincheff de Lazaroff. El hondureño, que llegó Fénix en enero, viene de marcar un doblete en la sorpresiva goleada del equipo de JR sobre Defensor Sporting.

“De los dos me quedo con el primero porque significó mucho para mí. Fue el primero con Fénix. Era mi tercer partido como titular y la tenía que romper. El gol se me había negado contra Liverpool y con Cerro y las oportunidades hay que aprovecharlas. Por suerte se dio un partido espectacular. Estoy muy contento, ya merecíamos ganar porque el equipo tiene buen plantel y buenos jugadores pero se nos estaban negando los triunfos. Por suerte se rompió esa mala racha”, dijo “Muma” tras la práctica matutina de ayer.

“Nos faltaba mejorar algunas cosas como la parte defensiva. Somos un equipo que ataca mucho y nos preocupábamos más por eso que por defender. Eso era lo que nos estaba faltando, pero ya están empezando a salir las cosas. El otro día ya convertimos y defendimos bien, explicó. El delantero había viajado a Honduras a pasar la Navidad tras finalizar su contrato con Cerro Largo, cuando lo contactó Juan Carlos Carrasco. Luego JR dio el visto bueno y a mediados de enero ya estaba en Montevideo.

Acostumbrarse a la forma de trabajar de Carrasco no fue sencillo. “Al principio fue un poco difícil. Yo estaba acostumbrado al fútbol normal y en Fénix, Carrasco tiene otro estilo de juego, con muchas jugadas. Gracias a Dios con la ayuda de los compañeros y la paciencia del cuerpo técnico pude ir agarrando esas jugadas que le gustan a él. Como fue un gran jugador es muy exigente. No te perdona dar un pase malo, quiere que sus jugadores estén muy concentrados en lo que pide. Y si no agarrás la jugada te la hace repetir muchas veces. Te explica, te llama, te manda videos al celular, insiste mucho en eso porque cree en su trabajo y en su idea. Pero también me dio un poco de libertad para hacer lo que me gusta a mí”.

“Muma” lleva tres partidos como titular, pero había ingresado desde el banco en los juegos anteriores. Salvo frente a Torque. “Ese partido no lo jugué por un castigo que me puso Carrasco por la ficha médica. Se me complicó ir a renovarla, fue la semana en que volvimos de Ecuador, pero todavía no se me vencía”, contó. “Siempre luché para ser titular, porque jugando 90’ es otra cosa. Tenés más oportunidades de anotar. Por suerte me he ganando el puesto y lo estoy defendiendo a muerte”.

Vive en una casa en Capurro a tres cuadras de la cancha. Y se siente a gusto entre los vecinos. “Es un barrio tranquilo y ya hice amistad con algunos hinchas. Durante la pandemia estaban pendientes de mí, me llamaban a ver si necesitaba algo porque estaba solo. Es gente muy buena”, dijo. Es que su familia no pudo venir por la pandemia y como termina su contrato el 31 de diciembre ya no vale la pena que viajen. “Fue complicado porque a veces no nos salían las cosas y venía a encerrarme solo. Pero yo siempre tengo ganas de superarme y pienso en mi familia y en mi hijo. Nunca bajo los brazos”. Quizás por eso en su estado de Whatsapp dice “Será difícil pero no imposible”.

“Soy fanático de esas frases motivacionales. No pierdo el tiempo pensando en lo que no se hizo, trabajo para el presente. Lo que va a pasar más adelante solo Dios lo sabe”.

En la fecha 13 Fénix recibirá a Cerro Largo. Será un partido especial para “Muma” que logró el ascenso con el equipo arachan. “Tengo muchas amistades allá en Melo. Es el equipo que me abrió las puertas y siempre voy a estar agradecido a Cerro Largo. El otro día ellos jugaban con Wanderers y de mañana estuvieron viendo nuestro partido con Defensor. Y me escribieron felicitándome. Siempre están pendiente de mi y yo de ellos”.