SELECCIÓN

Fabián Coito debe despejar aún una sola duda y es en el sector derecho

Apenas fue confirmado como técnico interino de la selección para el amistoso que Uruguay disputará mañana viernes (hora 23.06, VTV) ante México en Houston, Fabián Coito dejó en claro que no iba a tocar mucho, sino que se iba a basar en el equipo que venía jugando. Y viene cumpliendo.

Todavía no está confirmada la oncena que saldrá al campo de juego a afrontar el primer partido amistoso pos Mundial Rusia 2018, ese que depositó a La Celeste en el quinto lugar del mundo y también del Ranking FIFA.

Ausente Edinson Cavani (como lo estuvo en la derrota 2-0 ante Francia por cuartos de final), todo apunta a que el equipo sería el mismo de aquella tarde en Nizhny Nóvgorod, con Cristhian Stuani como compañero de ataque de Luis Suárez. Era una buena oportunidad para ver cómo respondían juntos el “Pistolero” y Maximiliano Gómez, pero por un problema de documentación de este último no fue convocado.

A propósito de Suárez, se incorporó el martes a la noche y por eso no pudo participar del primer movimiento futbolístico. La ofensiva estuvo compuesta por Stuani y Gastón Pereiro, pero está claro que el máximo goleador histórico de La Celeste tiene un lugar asegurado en el choque ante los mexicanos.

De hecho, ello se confirmó ayer durante el segundo entrenamiento, cuando Coito ya tuvo a todo el plantel a disposición, incluido Nicolás Lodeiro, quien se unió a último momento por la baja de Giorgian De Arrascaeta.

La duda que se plantea por el momento radica en la inclusión de Nahitan Nández o de Jonathan Urretaviscaya en el sector derecho del mediocampo, que como en el Mundial volvería a presentar a Rodrigo Bentancur como enganche en un 4-3-1-2 flexible, que por momentos se puede transformar en un 4-2-3-1, con Nández o Urretaviscaya por un lado, Stuani por el otro y Bentancur detrás de Suárez.

Coito ha probado tanto con el volante de Boca Juniors como con el mediopunta de Rayados de Monterrey y todavía tiene un movimiento más, el de hoy, para definir el equipo titular.

El dilema pasa por darle más marca al sector central o más velocidad en salida para enfrentar a un equipo que pasa con gran rapidez por la mitad del terreno.