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Martín Bueno, el uruguayo que juega en tierra de kiwis

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martin bueno

HISTORIAS

El delantero fue campeón con el Eastern Suburbs de Nueva Zelanda y acaba de clasificar a cuartos de final de la Champions de Oceanía.

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No son pocos los jóvenes uruguayos que deciden irse a trabajar a Nueva Zelanda: lo más común es a juntar kiwis. Ganan buen dinero y viven una experiencia diferente en un país maravilloso, casi un paraíso.

Martín Bueno vive hace dos años en Nueva Zelanda, pero no junta kiwis: juega al fútbol. Defiende al Eastern Suburbs en la Premiership neozelandesa, donde lleva 10 goles en 12 partidos. Y en estos momentos están jugando también la Champions League de Oceanía, donde clasificaron a cuartos de final en parte gracias a los seis goles en tres partidos que marcó el uruguayo.

Tras defender a Rampla Juniors, Plaza Colonia, Cerro Largo, Atenas de San Carlos y Cerrito, pero sin tener experiencia en Primera División, se fue a probar suerte a Italia. También jugó en México y en Estados Unidos.

“Estuve dando muchas vueltas en Italia y me quebré el pie. Y en ese momento, era marzo, la única liga que quedaba para ir a jugar era la Liga Invierno de Nueva Zelanda”, contó Martín desde Auckland, donde vive y a pesar de las 16 horas de diferencia que hay entre esa ciudad y Montevideo.

“La posibilidad surgió por medio del arquero de Atenas, Santiago Fernández, que ya había jugado acá y me contactó con un equipo que se llama Taranaki. Pero fue increíble porque una semana antes que yo viajara me llamaron para avisarme que el equipo no se iba a presentar a jugar. El dueño del equipo me dijo eso pero también que me conseguía una prueba para el Naipier City Rover, el primer equipo en el que jugué acá”, añadió Martín, quien viajó sin decirle la verdad a sus padres.

“No le dije nada a mi familia porque me iba a un experiencia totalmente nueva, en un país lejano y yo ni siquiera hablaba inglés. No les quise decir que se había caído lo del equipo al que iba. Pero así fue como arrancó todo”, contó el delantero de Eastern Suburbs, su tercer equipo en la tierra de los kiwis.

“En Nueva Zelanda encontré un país muy hermoso para vivir. Hermoso en todo sentido, geográficamente y por su gente. Y encontré la continuidad que necesitaba y también la estabilidad emocional que precisaba. En Nueva Zelanda pude volver a estar tranquilo, algo que hacía rato que no conseguía. Hacía mucho que no disfrutaba del momento como estoy haciendo ahora. Se dio todo”, reconoció quien venía de haberse separado de su pareja y de tomar una serie de malas decisiones. “Temas personales, de pareja, que te hacen perder un poco el rumbo en el fútbol. Cuando quedé soltero empecé a ponerme metas y volví a encontrar el rumbo. Obviamente, que uno es responsable de lo que le pasa”, dijo.

DESAFÍOS. Martín está solo en Nueva Zelanda. Es muy familiero, y extraña a sus padres Mariela y Javier, a su hermana Lucía y sobre todo a Antonio, su abuelo, que a sus 89 años sigue siendo, según dijo, uno de sus mejores amigos. “Hace ya seis años que me fui de Uruguay y a mí estos desafíos de conocer un país nuevo y con un idioma que siempre había querido aprender, me gustan. En principio mi objetivo era venir a Nueva Zelanda aprender el idioma y regresar a Italia. Pero lo que encontré acá me hizo quedarme un rato más”, afirmó.

“Hoy con mis compañeros nos reímos de lo malo que era mi inglés cuando llegué. Sabía lo básico, pero con el acento que tienen acá, no entendía nada. No sabía ni lo que les respondía. Además, viví con ingleses, canadienses y todos con acentos distintos. Pero acá la gente es muy buena onda”, explicó quien hoy vive con un compañero de equipo y su pareja en una zona muy linda de Auckland. “Estamos disfrutando mucho de este verano. Hace un rato que volvimos de la práctica y nos fuimos un rato a la playa”.

propuestas

Cuando la calidad de vida pesa

Bueno estuvo probándose en un equipo de Sudáfrica, donde la liga es superior a la neozelandesa. Finalmente no quedó porque el delantero al que iba a sustituir no se fue. Pero en ese mes extrañó mucho Nueva Zelanda. “Me costó, porque no se si habrá en el mundo un país con tanta calidad de vida como Nueva Zelanda. Lo mismo me pasa cuando viajamos a jugar la Champions”, admitió el atacante. “Y eso es algo que yo tengo en cuenta al decidir dónde jugar. Por ejemplo, me mandaron contratos para irme a Bangaldesh y a la India, pero me estuve interiorizando de los lugares y no quise ir”, contó Martín cuya familia ya viajó a visitarlo. “Por suerte ahora el avión agarra por el otro lado y son 13 horas, antes era mucho peor”.

DOS LIGAS. La liga fuerte de Nueva Zelanda es la Liga de Verano, la que se está jugando ahora, al mismo tiempo que la Champions de Oceanía. Es muy diferente a la Liga Invierno, que es más débil y en la que Martín jugó cuando llegó al país. “La Liga de Verano es una liga que está creciendo mucho. Es difícil para mi comparar el fútbol de acá con el de Uruguay porque yo allá solo jugué en Segunda División, en la B, nunca en un equipo de Primera. El fútbol acá es muy táctico. Mi equipo es el último campeón y tenemos un entrenador que es muy táctico, está siempre analizándolo todo. Los partidos son batallas tácticas más que físicas, contrariamente a lo que pasa en Uruguay. Acá se sale jugando y si te presionan el técnico ya pasó una semana estudiando cómo podemos contrarrestar ese tipo de presión y cómo tenemos que salir jugando”, explicó.

celebrando
Bueno celebra uno de sus goles con sus compañeros del Eastern Suburbs.

“Las grandes diferencias están en la organización y obviamente, en la infraestructura. Además, acá no hay alambrados en las canchas aunque el fútbol no es el deporte más importante. El deporte número uno es el rugby y después el cricket. Al fútbol va gente, pero no mucha. Y no hay episodios de violencia, eso no existe acá. La gente mira el partido desde un costado tranquilamente”, añadió y pasó de definirse como jugador.

“En estos años en Nueva Zelanda soy el típico número 9 que juega de espaldas y mete los goles. Antes era más de eludir y gambetear, pero ahora trato de aprovechar los espacios y estar siempre bien ubicado en el área”.

Tiene contrato con el Eastern Suburbs hasta que termine la actividad. Su mayor objetivo es jugar la final de la Champions de Oceanía y luego definir su futuro. Gracias a sus buenas actuaciones y a sus goles, ha tenido posibilidades de pasar a otras ligas más fuertes económicamente. No descarta dar otro salto en su carrera, aunque tampoco niega que seguir en Nueva Zelanda le encantaría.

los inicios

Trabajó en un depósito de muebles

Hoy Martín Bueno juega en el equipo campeón de la Premiership de Nueva Zelanda y está disputando la Champions League de Oceanía. Pero no siempre fue así. Cuando llegó para probarse en el Naipier City Rovers, donde luego fue campeón, su realidad era otra. “Al principio jugaba y trabajaba en un depósito de muebles. Trabajaba de verdad, unas 50 horas semanales. Hasta que empecé a hacer goles y todo cambió”, contó el uruguayo.
Del Naipier City Rovers pasó al Hamilton Wanders, donde fue goleador y Bota de Oro.
El Eastern Suburbs al que defiende actualmente es su tercer cuadro en Nueva Zelanda y el vigente campeón. Su contrato terminará cuando finalice la actividad, que él espera que sea jugando la final de la Champions League.

playa
Disfrutando de la playa en Auckland  donde vive, tras el entrenamiento.

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