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Chelsea hizo un partido perfecto, le ganó al City y es campeón de la Champions League

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Chelsea se consagró campeón de la Champions League en Portugal. Foot: EFE.

EN PORTUGAL

Con un gol de Kai Havertz, el equipo de Thomas Tuchel dio una lección de táctica, aprovechó su chance y obtuvo su segunda orejona.

La Champions League tuvo su definición en Porto y con público en las tribunas para el partido que tenía como protagonistas al Manchester City y al Chelsea, que se quedó con la victoria después de una excelente demostración táctica para levantar la orejona por segunda vez en su historia. 

Y más allá de que en la previa, los dirigidos por Pep Guardiola llegaban como grandes favoritos a esta instancia decisiva luego de dejar por el camino al PSG tras ganar en la ida 2-1 como visitante y en la revancha por 2 a 0, los ciudadanos no pudieron lograr el máximo objetivo que tenían en esta temporada.

Es que se vieron sorprendidos por un enorme planteo táctico del equipo de Thomas Tuchel, que avanzó a la gran final de Portugal luego de eliminar nada menos que al Real Madrid empatando 1-1 como visitante en España y ganando 2-1 en Londres, y que con un solitario gol de Kai Havertz a los 42' levantó la copa de campeón. 

La que Chelseta levantó en el Estadio do Dragao de Porto fue la segunda orejona de su historia luego de la que obtuvo en la temporada 2011-2012. 

Chelsea y Manchester City en la final de la Champions Leafue. Foto: EFE.
Chelsea y Manchester City en la final de la Champions Leafue. Foto: EFE.

Primer tiempo

Un tanto de Kai Havertz le dio ventaja al Chelsea en la primera parte de un partido en el que no pasó zozobras porque su sistema defensivo funcionó casi que a la perfección frente al Manchester City. 

Los dirigidos por Thomas Tuchel se defendieron muy bien y con un 1-5-2-3 a la hora de replegarse, le impidieron a los ciudadanos la generación de su clásico juego ofensivo.

Además, los londinenses dispusieron de las mejores ocasiones, sobre todo en los pies de Timo Werner, pero no pudieron abrir el marcador hasta el minuto 42, cuando Mason Mount le puso un exquisito pase filtrado a Kai Havertz, quien definió entrando al área y fortuna mediante terminó anotando el 1-0 del Chelsea.

Pero no todas fueron buenas para los de Londres porque en pleno primer tiempo, el brasileño Thiago Silva se lesionó y tuvo que abandonar la cancha para ser sustituido por Andreas Christensen.

Havertz celebra el gol del Chelsea en la final de la Champions League. Foto: EFE.
Havertz celebra el gol del Chelsea en la final de la Champions League. Foto: EFE.

Segundo tiempo

Pep Guardiola se había equivocado prescindiendo del mediocentro defensivo, Fernandinho o Rodri, en pos de un equipo más ofensivo. El City tenía una parte para ser el sexto equipo en remontar una final que llegaba perdiendo al descanso; el primero en ganar su primera Champions remontando desde Porto en 1987.

Su calma, como ganador de tres orejonas, dos como entrenador y una como jugador, contrastaba con la de su equipo, donde solo un jugador había llegado hasta este partido definitivo antes. Ilkay Gündogan.

Y encima, su mejor arma en el césped, su prolongación, se fue lesionado con lágrimas en los ojos porque tras un choque con Rudiger, De Bruyne abandonó la cancha abrazado a Guardiola y Lillo.

Aparecieron los nervios. El Chelsea replegó armas. Se empezó a jugar un partido más mental, más parado. Lo que deseaba un Tuchel inquieto en la banda que miraba insistentemente el reloj y que rozó el infarto cuando Azpilicueta, perfecto, negó un pase de la muerte a Gündogan. Y que acabó de rodillas cuando Pulisic pudo matar la final. Cruzó demasiado un mano a mano ante Ederson a 20 minutos del final.

Thomas Tuchel y su alegría tras ser campeón de la Champions League. Foto: EFE.
Thomas Tuchel y su alegría tras ser campeón de la Champions League. Foto: EFE.

El Chelsea estaba ya atrás con todo; el City, sin ideas, lanzando centros sin sentido, como si su sistema y Guardiola se hubieran bloqueado al notar la cercana mirada de la Champions.

La orejona, el gran objetivo de los jeques, se alejaba y aunque entrara Sergio Agüero, la magia del encuentro hace nueve años ante el QPR no se repitió. Aunque hubo susto con un bloqueo de Christensen a Foden en el área chica y con un remate de Mahrez rozando el palo en el último minuto.

Pero no hubo milagro. Fueron los "Blues" los que se rindieron a los pies del trofeo conquistando su segunda Champions Laegue y fue el City el que se volvió a Inglaterra con las manos vacías y sin el proyecto culminado. Guardiola cada vez está más cerca, pero tendrá que seguir esperando para abrazarse otra vez a la gloria.

Chelsea es el nuevo campeón de la Champions League. Foto: EFE.
Chelsea es el nuevo campeón de la Champions League. Foto: EFE.

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