EN AVELLANEDA

Pelota al ras del piso y circulando de un lado al otro hasta que las piezas se acomoden, llegada por las bandas y movimientos de respaldo tanto ofensivos como defensivos. Eso mostró un valiente Montevideo City Torque en su visita a Independiente por la Copa Sudamericana.

Con Santiago Rodríguez muy activo y las proyecciones de Franco Pizzichillo por la banda derecha, el equipo uruguayo generó superioridad en el juego, superó futbolísticamente al Rojo de Avellaneda y lo limitó a inquietar con un par de tiros libres desde la derecha que Fiermarín conjuró sin problemas.

Sí, el debutante MC Torque en torneos internacionales le plantó cara al Rey de Copas y que dejó la sensación de haber merecido algo más luego de los primeros 45 minutos, aunque también quedó planteada una incertidumbre: ¿aguantará el ritmo que impuso en la primera mitad?

Esa inquietud pasó a ser un poco menor cuando a los 49' Gustavo Del Prete marcó el gol. Fue una jugada que no solo reflejó en el marcador la superioridad que ejercía el conjunto uruguayo sobre el argentino, sino también la postura del conjunto orientado por Pablo Marini, porque la presión ejercida en la mitad de la cancha por el zaguero Diego Arismendi cortó la salida de Independiente y en una serie de toques rápidos de los que participaron Santiago Rodríguez y Marcelo Allende, llegó el tanto de Del Prete.

Y a su vez empezó a responderse la pregunta que había dejado el primer tiempo, porque los uruguayos no pudieron aguantar el ritmo que habían tenido en la primera mitad. Las energías le alcanzaron por 60 minutos, porque a partir de allí comenzaron a ser ellos los que corrían detrás de la pelota, ante un Independiente crecido en ataque y que llegó al segundo gol en solo ocho minutos.

Independiente reaccionó a partir de su técnico, Julio César Falcioni, quien mandó a la cancha a Jonathan Herrera, autor de los tres goles en la victoria del debut por 3-1 sobre Guavirá en Bolivia. A su vez, MC Torque pareció confiarse de su juego y esa loable intención de salir jugando siempre le jugó una mala pasada, porque Fiermarín quiso salir de jugando con el pie de aire, dejó la pelota corta y cayó el gol de Silvio Romero (previa habilitación de Roa), quien hasta entonces no había tenido ninguna oportunidad.

El Rojo encontró a sus goleadores justo a tiempo; o, mejor dicho, Falcioni los juntó, porque con el ingreso de Herrera tuvo más poder de fuego en el frente y fue éste quien puso el 2-1 y llegó a cuatro tantos en dos partidos.

El gol en contra de Diego Arismendi en el final no hizo más que marcar ahondar la injusticia, porque de ninguna manera hubo dos goles de diferencia. Pero son los tantos los que definen los partido e Independiente hizo tres, así que a llorar al cuartito.

Jugó bien Montevideo City Torque. Por momentos lo hizo muy bien y hasta puede decirse que vuelve a Uruguay con menos de lo que mereció, pero es un poco la historia de este equipo al que poco puede reprochársele, porque tuvo personalidad y valentía de jugarle de igual a igual a un grande de América. El Ciudadano sigue en su camino de aprendizaje y crecimiento. Este tropiezo será uno que seguramente capitalizará en el futuro. No se debe olvidar que este fue apenas su primer partido afuera de Uruguay.

Montevideo City Torque visita a Independiente en Avellaneda desde las 19.15 (ESPN3 y Directv) por la segunda fecha del Grupo B de la Copa Sudamericana. El conjunto Ciudadano igualó 1-1 en el debut ante Bahía, en tanto el Rojo se impuso 3-1 sobre Guabirá en Bolivia.