Cruyff fue incinerado en Barcelona, donde transformó al club; Pep: “No sabía de fútbol hasta que lo conocí”.

Con la entrada del minuto 13 había llegado el segundo gol de Francia ante Holanda y eso era lo que menos preocupaba en las tribunas del Amsterdam Arena. El juez ordenó detener el saque inicial y los jugadores de ambas selecciones comenzaron a aplaudir hasta el minuto 14, así como todo el estadio, engalanado con flores, mensajes y pancartas recordando a Johan Cruyff. Los homenajes se sucedieron en todos los estadios donde ayer se jugó al fútbol, pero el mayor luto se guardó en la tierra de los tulipanes, que perdió a su mayor ídolo, y particularmente en su barrio natal de Betondorp, donde centenares de vecinos fueron a peregrinar a su casa. Mucho más al sur de Europa, en Barcelona, fue donde ayer se incineraron los restos mortales de Cruyff en la más alta intimidad de la familia y amigos más cercanos. Vivió en la ciudad catalana e ideó, ya como entrenador y con sus revolucionarios conceptos futbolisticos, el exitoso "Barça" del presente. "Su legado es infinito. Yo no sabía nada de fútbol hasta que conocí a Cruyff. A veces me pregunto qué haría Johan en distintas situaciones", decía ayer su alumno más aventajado: Pep Guardiola.

De sus cientos de frases célebres, vale el rescate dos:

-"Yo digo que no es necesario correr tanto. El fútbol es un juego que se juega con el cerebro. Debes estar en el lugar adecuado en el momento adecuado, ni demasiado pronto ni demasiado tarde".

-"Todo el mundo sabe jugar al fútbol si le dejas cinco metros de espacio".

Hendrik Johannes Cruijff, conocido internacionalmente como Johan Cruyff, nació en Amsterdam (Países Bajos) el 25 de abril de 1947 y murió en Barcelona (España) a los 68 años. Como jugador ganó 3 Balones de Oro, 9 ligas holandesas, 6 copas holandesas, 3 Copas de Europa, una Intercontinental, una Supercopa de Europa, una liga española y una Copa del Rey.

ELIMINATORIASJORGE ALDEA