PEÑAROL

Jugó en Tercera División el martes, Diego López lo vio, lo puso en el banco de suplentes y volvió a jugar en Primera.

Este domingo se cumplen siete meses exactos de la lesión de ligamentos cruzados que sufrió Walter Gargano en el Tróccoli ante Cerro, pero eso no le impidió estar en el partido que más quería: el clásico.

Cabe recordar que luego del choque ante Fénix, Gargano declaró que para el clásico él estaba a disposición que la decisión era toda del entrenador. Dejó la pelota del lado del "Memo", este no dudó y por eso puede sumar minutos en el clásico.

El pasado martes volvió a las canchas jugando en Tercera División, en Las Acacias, frente a Fénix y en la tribuna estaba el "Memo". El entrenador lo observó, lo vio bien y por eso apostó por ponerlo en el banco de suplentes.

Es cierto que fue al banco de suplentes, pero sus ganas fueron más fuertes y por eso Diego López lo consideró uno de los relevos, dejando afuera por ejemplo a hombres como Marcel Novick, Rodrigo Rojo o Ignacio Lores.

Pero en el minuto 78' tuvo su oportunidad. Peñarol estaba abajo en el marcador y el entrenador hizo un cambio arriesgado. Sacó a Darwin Núñez, adelantó al "Cebolla" y puso al "Mota" a jugar de doble cinco junto a Guzmán Pereira.

De esta manera, Gargano volvió a vestirse como jugador aurinegro de Primera División.