DESDE EL ARCO
JOSÉ MASTANDREA
Por primera vez en mucho tiempo hay unanimidad: a Uruguay le tocó un grupo accesible, sin ninguna selección de peso, de esas que hacen abrir grandes los ojos y poner cara de ¡qué mala liga!
Egipto, Arabia Saudita y Rusia, en ese orden, serán los rivales de la Celeste en la Copa del Mundo 2018. Y en lo previo, no tendría que tener problemas en clasificar.
Escribo en lo previo, porque después, en la cancha, puede pasar cualquier cosa. Como sucedió en los últimos mundiales con esta selección.
Le ganó a Sudáfrica, llegó a semifinales en 2010, pero cuatro después, perdió en el debut ante Costa Rica y tuvo que remarla nada menos que con Inglaterra e Italia.
Hay plantel, hay figuras, y Tabárez abrió las puertas definitivamente al futuro. Es lo que alimenta la ilusión.