CRISIS SANITARIA

Los entrenadores y, particularmente, los jugadores de la Ligue 1 y la Ligue 2 de Francia están cada vez más reacios a retornar a la actividad deportiva como lo están manejando oficialmente los presidentes de las instituciones. Así lo informó el diario francés Le Parisien, que agregó que el sindicato de futbolistas podría emitir una recomendación contundente.

Según Le Parisien el UNFP entregaría "un no fuerte y masivo al regreso al campo". Y esta negativa generaría un problema con las autoridades del fútbol y hasta podría hacerlo con el propio Estado francés.

Es por eso que en Francia, según el propio diario, la Liga (LFP) todavía está trabajando en la hipótesis del retorno a la competencia. Una es terminar la L1 el 25 de julio y comenzar la próxima temporada el 23 de agosto.

La preocupación de entrenadores y futbolistas radica en el hecho de que es real el peligro que existe de contraer la enfermedad en un deporte donde el distanciamiento social es imposible y los portadores a veces son asintomáticos. Incluso si estos casos son raros, el COVID-19 ya apareció desde el comienzo de la epidemia en jóvenes que parecían estar en buena forma, sin patología secundaria.

Por eso mismo, el fútbol todavía parece estar lejos de las cabezas de los jugadores y entrenadores.