ESPAÑA
El mediocampista uruguayo del Real Madrid, reconoció que "no es lindo" la situación que están viviendo los jugadores madridistas, pero aseguró que hasta el final de temporada van a dejar "todo porque el escudo lo merece".
"Esto es el Real Madrid y para nada se está haciendo larga la temporada. En cada partido aquí tienes que salir a ganar aunque no es lindo lo que estamos viviendo, pero estar en este club siempre te da fuerza y motivación", afirmó en la zona mixta del Santiago Bernabéu.
Federico Valverde expresó su agradecimiento a los aficionados madridistas que acudieron al Bernabéu en una tarde fría y de lluvia, pese a que el Real Madrid no se juega nada: "Hay que tirar de orgullo por la gente que viene. Hoy lo hicieron a pesar del tiempo. Por ellos en cada partido hay que dejarse todo y porque el escudo del Real Madrid lo merece. Tenemos que dejar el nombre del club lo más alto posible"
?? ¡Las palabras de @fedeevalverde tras la victoria frente al @SDEibar! Con especial mención a @Benzema... #RMLiga pic.twitter.com/VW6xGHlCcW
— Real Madrid C.F.? (@realmadrid) 6 de abril de 2019
Cuestionado sobre su futuro, mostró su deseo de seguir a las órdenes de Zinedine Zidane la próxima temporada. "Mi preferencia es estar en el Real Madrid. Siempre soñé y trabajé duro para jugar aquí y lo he cumplido", afirmó con contundencia.
"Doy lo mejor que tengo, así que si me toca irme lo haré sabiendo que di lo mejor de mí y si me toca quedarme, será bienvenido. Yo entreno duro y en cada partido que tengo oportunidad me entrego, luego el futuro lo decidirán el club y el míster", sentenció.
Un buen triunfo en casa ?? ??#HalaMadrid pic.twitter.com/9jsJIoTATM
— Fede Valverde (@fedeevalverde) 6 de abril de 2019
2-1: Benzema rescató el orgullo del Real Madrid
Dos goles de Karim Benzema, en el papel de 9 que tanto se le demandó desde su llegada al Real Madrid, propiciaron la remontada del equipo blanco ante el Eibar (2-1) en una tarde desapacible en el Santiago Bernabéu, con dos caras del conjunto de Zinedine Zidane, dominado y silbado en el primer tiempo antes de rescatar el orgullo.