ALIANZA LIMA

Federico Rodríguez se incorporó a Alianza Lima, el equipo dirigido por Pablo Bengoechea, en julio pasado. El llamado del “Profesor” le sorprendió, pero no lo pensó mucho. Rescindió su contrato con Danubio, hizo las valijas y se fue a vivir a Lima.

La intención de Bengoechea al sumarlo era ganar el torneo Clausura para volver a pelear por el campeonato nacional, tal como sucedió en 2017. El primer paso ya está dado: Alianza Lima venció a Unión Comercio por 3 a 2 y se quedó con el Clausura. Uno de los goles lo anotó Federico. El “Profesor” no se equivocó en su apuesta.

“Estoy recontento, sobre todo por haberle podido devolver la confianza a Pablo”, dijo Federico desde su apartamento en el barrio Miraflores y tras almorzar un pollo sin condimentar. Es que en Perú el picante está a la orden del día y el delantero se cuida. “La comida acá es excelente. La causa de cangrejo es riquísima y hay un pescado dorado frito exquisito. Probé ceviche también”, contó.

Llegó a Lima el 15 de julio y a los tres días estuvo en el banco frente a Sporting Cristal. Al partido siguiente entró 15’ y en el tercero ya fue titular; no salió más. 

“Acá el fútbol es mucho más dinámico, pero menos aguerrido. Acá se marca menos y en todos los partidos se hacen bastantes goles. Y eso a mí me conviene. Se juega muy bien acá. Además, Alianza es un grande, tiene muy buenos jugadores y un equipo que va arriba le permite al delantero destacarse más”, explicó quien nunca había sido campeón, salvo en la B.

“Es el cuadro que tiene más hinchada en Perú. Por suerte pudimos salir campeones porque era una obligación”, añadió quien comparte equipo con otros tres uruguayos: Gonzalo Godoy, Felipe Rodríguez y Adrián Balboa.

Federico tiene contrato hasta julio del año que viene. Y toda la familia está muy adaptada: su esposa Tatiana, el pequeño Franco -que cumplirá dos años el mes que viene- y los dos perros, Otto y Teo, que también viajaron desde Montevideo.

“El otro día cuando volvimos de jugar con Unión Comercio ‘Tati’ y Franco me fueron a esperar al aeropuerto. Era tarde, pero Franco aguantó. Se pasaron”.