Peñarol espera a Rampla pero mira el clásico de reojo; Aguiar afuera, y Diogo y MacEachen “en capilla”

No debe ser nada fácil estar en la piel de Pablo Bengoechea por estas horas. Porque al igual que todo Peñarol, sabe que tiene una final con Rampla Juniors y después le llega el clásico, dos partidos que bien pueden marcar el rumbo de los aurinegros en el tramo final del Torneo Clausura.

Es que después de la derrota ante Danubio (3-2) y el empate frente a Atenas (1-1) Peñarol la está remando de atrás en la tabla. Quedó segundo a dos puntos de los franjerados, y ya no puede dejar más unidades por el camino. Hoy está entre la espada y la pared, porque tiene que afrontar el partido con los "picapiedras" y después se le viene encima el clásico ante Nacional.

Por eso el entrenador decidió "sacar" a Carlos Valdez (por quinta tarjeta amarilla) y también cuidar a Luis Aguiar, sentido en una de sus rodillas en el entrenamiento del jueves, y prácticamente con un pie afuera del equipo.

El volante será probado hoy para saber si llega o no al partido de mañana ante los rojiverdes, pero lo más seguro es que se lo "cuide" para el clásico y su lugar en el mediocampo sea ocupado por el juvenil Naithan Nandez.

El probable equipo de los aurinegros estaría conformado por Pablo Migliore en el arco, Jonathan Sandoval, Gonzalo Viera ingresará en lugar de Valdez, Emilio Mac Eachen y Diogo Silvestre en la línea de fondo, Sebastián Píriz, Luis Aguiar o Nahitan Nandez, Jonathan Urretaviscaya, Jorge "Japo" Rodríguez en el mediocampo, Antonio Pacheco y Marcelo Zalayeta en ofensiva.

"El gran pecado que tenemos es la derrota ante Danubio. Fue un partido donde Peñarol jugó muy bien durante un tiempo y medio. Hicimos un buen partido pero no logramos el triunfo, y eso lo estamos pagando hoy", dijo Bengoechea el jueves.

"Estamos complicados en el Clausura, tenemos que ganar, ya no tenemos margen de error", agregó el entrenador.

Peñarol necesita los tres puntos ante Rampla y la victoria frente a Nacional, no puede descuidar ni uno ni otro. Está entre la espada y la pared en el tramo final del Clausura.

PeñarolJOSÉ MASTANDREA