NACIONAL

JUAN PABLO ROMERO

Los futbolistas profesionales tienen que adaptarse a la situación que está viviendo el mundo y en especial Uruguay referido a las medidas para prevenir la propagación de Covid-19. Y claramente los futbolistas de Nacional no son ajeno a ello.

Los tricolores decidieron el domingo suspender todo tipo de actividad en el complejo deportivo de Los Céspedes, tanto de formativas como en lo que tiene que ver con el plantel principal.

Por esa razón es que se suspendieron los entrenamientos colectivos y desde ayer se armaron grupos reducidos de jugadores que trabajaron junto a un preparador físico de la institución en diferentes zonas de Montevideo.

Incluso a los jugadores que son del interior no se les permitió que viajen a sus departamentos, para correr la menor cantidad de riesgo de una posible infección.

Así, algunos futbolistas subieron a sus redes sociales fotos con su grupo de trabajo. Y se pudo observar a Mathías Laborda trabajar junto a Guzmán Corujo (la dupla de zagueros titulares), además del también defensa central, el paraguayo Miguel Jacquet, que fue titular en los partidos contra Liverpool (final de la Supercopa Uruguaya), y contra Wanderers en el Apertura. Ese grupo se ejercitó con el profe Ignacio Barboza, que habitualmente trabaja en Tercera División junto a Martín y Diego Ligüera.

Otro de los grupos fue el que compartieron Gabriel Neves, Claudio Yacob y Felipe Carballo; ellos se movieron en el Prado. Agustín Oliveros trabajó junto a Ayrton Cougo, Renzo Orihuela y un preparador físico de formativas, mientras que Armando Méndez lo hizo con Thiago Vecino y Alfonso Trezza.

La idea es continuar con esta modalidad durante la semana. Los jugadores se ejercitan en base a los trabajos indicados por los profes, que previamente fueron elaborados por los encargados del plantel principal: Félix Martínez, Nicolás Maidana y Juan Manuel Alzamendi.

Esta claro que a lo que se apunta es a mantener lo más posible la forma física de cada uno de los futbolistas, pero es indudable que no se puede hacer nada referido a lo táctico y a lo que pretende Gustavo Munúa en la cancha. Al menos, al trabajar de a tres, se hace más ameno el movimiento.