AMISTOSO

Con un equipo mixto, los faraones igualaron sin goles ante un elenco cafetero que fue totalmente superior al africano.

Qué falta que le hace Salah a la selección de Egipto. Los de Héctor Cúper salieron a jugar ante Colombia en el estadio de Atalanta con un 4-2-3-1, que con el transcurso del partido se apreció mucho más defensivo que ofensivo.

Mahmoud Hassan, más conocido como Trezeguet, fue quien suplantó a Salah y estuvo lejos de demostrar el nivel que tiene el jugador del Liverpool y que seguramente Egipto extrañará mucho.

El elenco africano se preocupó más de que el balón no ingresara a su arco de querer meterlo en el arco rival y se notó. Colombia se hizo amo y señor de la tenencia de la pelota y atacó una y otra vez a un equipo egipcio que despejó el esférico en los momentos certeros o que aprovechó la mala puntería colombiana.

Con James Rodríguez y Radamel Falcao García a la cabeza, los sudamericanos fueron ampliamente superiores a su par africano, pero falló en la estocada final. Como si eso fuera poco, el juego se hizo muy cortado porque precisamente Egipto se mostró como un equipo al que no le molesta pegar si es la manera de detener los avances rivales.

Teniendo eso en cuenta, Uruguay deberá trabajar mucho en las pelotas quietas de cara al encuentro que los enfrentará en la Copa del Mundo, en lo que será el debut de ambos en el certamen.

Egipto tuvo sus chances de anotar, es cierto, pero fue un partido flojo de los africanos donde extrañaron mucho a Salah y donde Ahmed El-Mohamady, que fue el que suplantó a Trezeguet en el inicio de la primera parte, tampoco pudo hacer olvidar a una estrella que sin duda pesa y mucho en el esquema egipcio.