“Prefiero que me hagan tres goles y ganemos 4-3, como con Cerro, a que nos empaten y yo sea figura”, remarcó.

Aprovechó los dos días libres que le dio el cuerpo técnico para visitar a sus suegros en Paysandú y al resto de sus familiares en Young. También fue a buscar algunas cosas que se trajo de Argentina, ya que está en plena mudanza a una casa en El Pinar. Esteban Conde es el arquero que Gustavo Munúa pidió para suplantarlo a él mismo y desde que llegó a Nacional no faltó ni en uno de los 11 partidos de la temporada.

Si bien en encuentros anteriores su actuación había sido correcta, sin mayores sobresaltos ni incidencia en los goles rivales, hasta el sábado no había podido destacarse, más allá de mostrar su buen juego con el pie y de estar atento a las espaldas de los zagueros. Pero en Florida, contra El Tanque Sisley, jugó un gran partido y tuvo soberbias atajadas. Por si fuera poco, le tapó un penal a Elías Ricardo Figueroa.

"Había tenido algunas actuaciones que no fueron tan vistosas, pero habían sido muy sólidas en cuanto a lo que el entrenador me pide: hacer circular la pelota conmigo, anticipar los pases a las espaldas de los defensores cuando estamos defendiendo en mitad de cancha. Ese tipo de cosas que Gustavo me pide han salido mucho más veces que tapadas en sí y el otro día en cuanto a atajadas fue mucho más llamativa mi actuación", analiza el guardameta albo, mientras continúa explicando que "cuando uno es nuevo en un lugar se sabe que la gente te tiene en estudio durante un tiempo hasta que te ven atajar y ven tus condiciones. Hasta el momento no habían visto grandes atajadas".

Conde es gráfico en su opinión: "Prefiero que me hagan tres goles y ganemos 4-3, como fue con Cerro, a que nos empaten el partido teniendo yo una buena actuación. Lo principal es lo grupal más allá de lo individual, que no creo que tenga tanta importancia".

El arquero de 32 años, que jugó en Rentistas, Danubio, Universidad de Chile y Atlético Rafaela, insistió en que se siente cómodo con la propuesta de Munúa. "Me siento bien, con total soltura; me ha tocado, sobre todo en la etapa de Rafaela, salir jugando mucho con los pies también, cuando estuvo de entrenador Roberto Sensini. Él tiene un estilo muy identificado con Newells , un estilo Bielsista, que es casi como una obligación que el arquero juegue con los pies para darle opción al equipo y en este caso no varía demasiado. Sí por ahí en Rafaela nosotros no defendíamos tan adelante por una cuestión lógica, acá Nacional tiene que proponer, por historia, por jerarquía y se toman riesgos que por ahí en Rafaela no eran tantos".

Precisamente, por la forma de jugar de Nacional, Conde explica el hecho de que el equipo haya recibido 10 goles en las primeras siete fechas del Apertura. "Con la propuesta se asumen muchos riesgos y es lógico que quedemos expuestos por momentos, pero también apuntamos a mejorar en cada detalle, y uno de los detalles a mejorar es que pretendemos ser un equipo más sólido y que a su vez arriesgue mucho, entonces no es tan fácil conseguirlo. Los riesgos se corren al defender más adelante. Más allá de todo, es más importante hacer un gol más que el rival para ganar", apuntó el golero albo.

Conde contó que "al llegar traté de no ponerme expectativas, de dejarme sorprender por cada detalle y lo sigo haciendo. Cada cosa que vivo acá es parte del sueño cumplido. Cada cosa que vivo me encanta, la disfruto. Nosotros como seres humanos juzgamos todo como bueno o malo. Cuando a veces tenés reveses deportivos parece que todo está mal y yo no creo que todo sea así, trato de disfrutar de cada situación. A veces, los momentos malos son grandes oportunidades de aprender y crecer. Cuando se toma de esa manera se logra disfrutar de cada cosa. La palabra que resume mi estadía en Nacional es disfrutar".

"Uno debe adaptarse. En mi caso no lo tomo como una complicación".

"Nacional tiene gran nivel de jugadores, no sólo en Primera, también en juveniles".

"En Rafaela me tocó jugar mucho con el pie, cuando estaba Sensini como técnico".

NACIONALJUAN PABLO ROMERO