Se puede, claro que se puede. Ya lo demostró Wanderers con su tribuna Tolerancia en el clásico de barrio ante River Plate. Y varios clubes, como Plaza Colonia, Sud América, Racing y Juventud, utilizan sus redes sociales con mensajes de solidaridad y salutaciones a los adversarios de turno.

Habría que imitar a Wanderers, no dejarlo solo en esta propuesta de inclusión, que apela a la familia, a que la gente de bien regrese al fútbol y lo disfrute como un espectáculo más, no como una batalla de cada fin de semana.

Abuelos, padres, hijos y nietos vivieron el partido en la misma tribunas, con camisetas diferentes. Cada uno alentando (sin insultos, ni agravios) al club de sus amores.

Se puede, claro que se puede. Solo hay que proponérselo y hablarlo con la dirigencia del rival.

Hay muchos partidos del medio que se pueden vivir en familia, sin violencia, comentando el juego con “el de al lado” así no comulgue con los mismos colores ni analice el fútbol de la misma manera.

Estamos a tiempo. Es un paso más, pero un paso muy importante para empezar a cambiar, para comenzar a vivir el fútbol de otra manera.

Se puede, hay que acompañar a Wanderers. No lo dejen solo.

DESDE EL ARCOJOSÉ MASTANDREA